Día a día las celebrities dejan en manos de la justicia algunos temas que les salpican, personal o profesionalmente. Ahora es el turno de Drake, la expareja de [i/]https://www.bekia.es/celebrities/rihanna/[i]Rihanna[/i]. En esta ocasión la demanda está relacionada con temas de su vida privada, aunque siendo una superestrella lo privado resulta complicado.
El cantante ha demandado a Layla Lace, una mujer que afirmó que estaba esperando a un hijo del rapero y, además, que había sido agredida sexualmente por Drake. El cantante ha decidido tomar partido en el asunto y demandarla por extorsión civil, fraude y difamación. Además también alega a un ataque emocional.
Tras un año de peleas
Pero esto es solo el final de una historia que comenzó en 2017. Según TMZ en febrero de ese año las vidas de Layla Lace y Drake se cruzaron tras un concierto del rapero en Manchester durante su gira Boy Meets World Tour. El cantante reconoció que tuvieron un encuentro amoroso en un hotel, ambos de manera voluntaria.
Tras esto Layla Lace creía que había comenzado una relación con Drake, ya que, como ha declarado el rapero, ella enviaba mensajes de texto en los que afirmaba, de manera continua, que le echaba de menos. Tras estos rifirrafes, en abril de 2017 Layla Lace publicaba en sus redes sociales que esperaba un hijo y que el padre aún no se había enterado.
Y, por si no fuera poco, Layla Lace decidió acudir a un programa de radio de 'SiriusXM' donde afirmaba que el padre era Drake. Un mes más tarde, en mayo de 2017, el cantante se enfrentaba legalmente a Layla Lace ya que le pedía la manutención del pequeño, que habría nacido en otoño de 2017. Pero, como es lógico, Drake pidió una prueba de paternidad que nunca se realizó.
Meses más tarde, Layla Lace pasó del embarazo a acusaciones sexuales. Acudió a las fuerzas del orden de Nueva York para denunciar a Drake por acoso sexual, con un nuevo abogado que pidió dinero a cambio de no hacer pública la noticia. Y un año más tarde del comienzo de esta historia, el rapero ha decido tomar firmemente cartas sobre el asunto, a la espera de que la justicia este a su favor.