Caritina Goyanes, hermana de Carla Goyanes, fallecía de manera inesperada el pasado 26 de agosto de 2024, víctima de un infarto a los 46 años. La inesperada partida de la hija mayor de Cari Lapique y Carlos Goyanes ha sido un duro golpe para su familia, dejando a su esposo, Antonio Matos, y a sus dos hijos, así como a sus seres queridos, muy afectados.
Ahora, a pocas semanas de que se cumplan seis meses desde su muerte, su hermana Carla Goyanes ha querido dedicarle una emotiva carta para rendirle homenaje, publicada por la revista ¡Hola!, revista que ha reconocido a la empresaria fallecida como la "estrella del año": "Te han elegido estrella del año porque, a pesar de haber sido siempre muy discreta, te hacías querer también por la prensa y por todas las personas que te conocían a través de los medios", comenzaba diciendo la carta.
"Esa era una de tus grandes virtudes: hacerte querer. Es un orgullo para mí ver lo mucho que te quiere la gente, cuántas muestras de cariño en estos meses, cuánto apoyo de conocidos y desconocidos", escribía orgullosa de ella su hermana. Una carta llena de nostalgia, orgullo y esperanzas: "En estos meses, nos estás dando fuerzas desde el cielo a todos para seguir adelante, para hacer que la vida siga (diferente y triste, pero que siga) y que hagamos que tus hijos y los míos estén bien. Estarás feliz y orgullosa de ver que, pese a que todos los días te echamos de menos, tus hijos están siendo supermaduros, responsables y están rodeados de amor", continuaba.
Su hermana recuerda que Caritina era "una hija y una madre diez": "Eras una madre entregada, cariñosa y comprensiva, pero exigente. Al pie del cañón cuando te necesitaban. Haciendo malabares para conciliar". En el aspecto profesional, también quiso destacar su gran trabajo: "Eras la mejor jefa que podían tener en Sixsens. Siempre pendiente de tu gente, exigente cuando había que serlo, pero a la vez divertida y con mucha mano izquierda. Tu equipo sigue fiel a ti y Matos lo está haciendo muy bien. Siéntete tranquila ".
Una hermana llena de orgullo
"Eras todo corazón", escribía una hermana nostálgica pero orgullosa. "Como hermana, es que no puedo ni describirlo. Te echo tanto de menos, pero iba a ser positiva. Gracias por tanto, por lo que me has enseñado, antes y después de irte; por todas las veces que has estado ahí cuando te he necesitado (..) por cómo te has volcado siempre con mis hijos; por dejarme recuerdos felices". Terminaba la carta mandando un rotundo mensaje: "Ten por seguro que, con tu ayuda, voy a cumplir con la promesa de cuidar de mamá y de tus hijos lo que me dejen. Con tanto amor a su alrededor, tengo mucha competencia ".