Diego Simeone, más conocido como Cholo Simeone, ha disfrutado de una nueva victoria del Atlético de Madrid, el equipo de fútbol que entrena desde el pasado 2011. El equipo se ha alzado con la Europa League 2018 tras enfrentarse al Olympique de Marsella. En una ocasión tan especial el entrenador ha contado con el apoyo indiscutible de su pareja, la modelo Carla Pereyra, y también de todos sus hijos, incluyendo a la pequeña Francesca.
Tanto ella, la pequeña como sus tres hijos, Giovanni, Gianluca y Giuliano, se han tirado al terreno de juego para celebrar un momento tan especial para su padre. Mientras tanto, la modelo ya había mostrando a través de las redes sociales que estaría al pie del cañón en Lyon con toda su familia para apoyar al equipo y a Simeone.
El entrenador, después de la sanción impuesta tras insultar al árbitro francés durante las semifinales con el Arsenal, no pudo estar en el terrero de juego, por lo que permaneció en el estadio francés estando lejos de los jugadores. Este obstáculo parece no haber estado presente en la filosofía de juego, puesto que su apoyo incondicional -aunque fuese en la distancia- ha conseguido dar sus frutos.
Progresos notables en el club rojiblanco
Aunque futbolísticamente hablando no ha sido el mejor año del equipo, este resultado se ha convertido en un chute de adrenalina que ha disfrutado tanto él como los jugadores rojiblancos. Este se ha convertido en el sexto título para el equipo bajo la dirección de Simeone, situando al Atlético de Madrid en segundo posición entre el ránking de clubes de la UEFA, solo superado por el Real Madrid.
Desde la llegada de Simeone está claro que el equipo no solo ha crecido en el terreno de juego, sino en lo que se refiere a los aspectos económicos. Su presupuesto ha aumentado, igual que el de sus patrocinadores, y qué decir de los salarios. No obstante, en ese sentido sigue siendo un club a la cola en comparación con otros españoles o europeos.