Hay nombres que siempre pasan a la historia tras haber demostrado una larga y pletórica trayectoria profesional, como es el caso de Fernando Hierro. Un exfutbolista que demostró su rápido aprendizaje en el que, sin duda alguna, ha sido el club de su vida, el Real Madrid, y que desde hace una temporada asume el cargo como entrenador del equipo del Real Oviedo. Es allí donde el deportista pretende, además, hacer del conjunto asturiano un equipo de primera, transmitiendo todos aquellos valores y conocimientos que durante su etapa madridista ganó .
Concretamente, fue el 8 de junio de 2016 cuando el malagueño aceptó hacerse cargo de este nuevo puesto frente al banquillo asturiano, tras haber desempeñado las funciones como entrenador adjunto de Carlos Ancelotti en el año 2015. No obstante, y a pesar de que la capital madrileña ya era considerada por Hierro como su segunda casa, los cambios en la vida del exfutbolista eran ya todo un hecho. Empezando por el que ha sido su rincón favorito de Madrid durante todos estos años: su increíble mansión de Puerta de Hierro.
Una característica vivienda de 900 metros cuadrados, propia de esta lujosa urbanización madrileña, en la que ha compartido su rutina de vida durante décadas al lado de su mujer Sonia y de sus dos hijos, ya mayores, Claudia y Álvaro. Y es que el prestigio que este particular enclave lleva generando desde hace años, gracias a la privacidad, seguridad y tranquilidad que ofrece, le han ayudado a convertirse en el lugar preferido de residencia de muchos rostros conocidos en el mundo de la interpretación y el deporte. De ahí que para Hierro no pareciera extraño cruzarse por la urbanización con figuras como Isabel Preysler, Jesús Vázquez o Iker Casillas.
Ahora, dejando atrás ese lazo que tantos años le ha mantenido unido al club blanco, Hierro se enfrenta a la que ,desde hace doce meses, lleva siendo una de la temporadas más importantes de su vida. Aunque eso sí, toda decisión también trae consigo sus correspondientes consecuencias, como las que rodean a Hierro desde el pasado año 2015. Y es que el hecho de haber trasladado su residencia al norte de España ha provocado que su vínculo con la capital no sea tan fuerte como hasta hace poco, viéndose en la necesidad de poner en venta su lujoso refugio madrileño.
Rebajas de última hora
Sucedió hace poco más de un año, cuando el malagueño decidió sacar el cartel de "se vende" y cerrar la que, sin duda alguna, se ha convertido en la experiencia más fructífera de toda su carrera profesional. Por aquel entonces, el precio de salida de la vivienda alcanzaba los 3.6 millones de euros, una cifra equiparable al resto de propiedades de la zona. Sin embargo, tras más de un año en el mercado y sin haber sido capaz de encontrar comprador alguno, la necesidad de una rebaja de precio parecía inevitable. De esta forma, y con el objetivo de llamar más la atención del público inmobiliario, el ex jugador ha optado por reducir la cifra de venta 700.000 euros.
Así, el interesado que a partir de ahora pueda plantearse la posibilidad de comprar la que hasta hace poco constituía la residencia familiar de la familia Hierro en Madrid, debe saber que para ello deberá desembolsar la cuantiosa cantidad de 2.9 millones de euros. Un precio final que, por supuesto, se adapta tanto a las condiciones como a la calidad de vida que este rincón madrileño ofrece, aislado de todo el gentío de la ciudad. Y no solo eso, sino que a su vez se trata de una urbanización donde la tranquilidad recorre todos y cada uno de los rincones de su extenso terreno, respirando pura comodidad en cada una de sus propiedades.
En el caso concreto de la mansión de Hierro, cuya venta se encuentra bajo las riendas de la inmobiliaria del hijo de Jesús Gil, el atractivo de su exterior y el diseño y la decoración de sus estancias hacen que la jugosidad de la vivienda quede reflejada por donde se mire. Así, en lo que respecta a su imagen exterior, por ejemplo, la zona ajardinada, la piscina, la cancha de baloncesto, la pista de padel y la terraza -con acceso a la casa- se presentan como las primeras maravillas de esta jugosa propiedad. Allí Hierro habrá podido reunir a sus amigos en más de una ocasión y disfrutar de largas jornadas de verano entre baños, comidas, cenas y veladas junto a su pareja.
Presumiendo de bodega y sauna
Aunque todo esto solo parece ser un adelanto de lo que uno puede llegar a encontrarse en el interior de la vivienda. Una serie de estancias distribuidas en tres pisos donde el cuidado y la atención reinan por encima de cualquier cosa. De primeras, y nada mas atravesar el hall de entrada, uno se encuenta con un enorme espacio totalmente diáfano, donde se instalan los diferentes salones de la casa, una cocina con aires rústicos e isla central, dos dormitorios con baño privado, una oficina de trabajo y un aseo.
Seguidamente, a esta propiedad con " diseños exclusivos " y " unos acabados de altísima calidad ", tal y como lo califica la propia inmobiliaria, le sucede una segunda planta donde se distribuyen en total otros dos dormitorios junto con la estancia principal. Además, lo que le hace ser diferente al resto de habitaciones es el hecho de estar acompanada, además, por su propia zona de estar, un espléndido vestidor y un espacioso cuarto de baño. A todas estas estancias hay que añadir un cuarto de trofeos, una bodega climatizada, una sala de cine, una sauna, un dormitorio para el servicio y un amplio garaje. Sin duda, una autentica joya del mercado.