La cantante Demi Lovato fue ingresada el pasado 24 de julio en el hospital Cedars Sinai de Los Ángeles al ser encontrada inconsciente en su casa de Hollywood a causa de una posible sobredosis. Su estado llegó a ser preocupante, tanto que se temió por su vida durante las dos semanas en las que ha estado hospitalizada, ya que sufrió fiebres muy altas, vómitos y otra serie de complicaciones que hicieron más difícil su recuperación.
Lovato, que había estado celebrando durante toda la noche el cumpleaños de su amiga Dani Vitale, decidió regresar a su casa, donde fue encontrada horas más tarde. Aunque en un principio se rumoreó que la posible sobredosis de la cantante era por heroína, el portal TMZ asegura que el verdadero culpable de la sobredosis fue el fentanilo, un opiáceo 50 veces más fuerte que la heroína y 100 veces mas que la morfina.
Esta misma sustancia fue la que acabó con la vida del cantante Prince en el mes de abril del 2016, tal y como indicó un informe médico en ese año, pues el propio Prince se lo administró causándose una sobredosis accidental. El origen de este fármaco surgió con el fin de calmar el dolor de los pacientes de cáncer.
Luchará contra su adicción
La cantante siempre ha sido muy transparente con el tema de sus problemas de adicción con el alcohol y las drogas. Por lo que una vez más ha querido ser sincera con los miles de seguidores que la han apoyado en estas dos semanas en las que ha estado ingresada en el hospital. Demi Lovato ha querido dar las "gracias a Dios por mantener con vida" y a sus fans por el tremendo apoyo que ha recibido. Además, ha confirmado a través de su perfil de Instagram que se centrará en su "sobriedad y recuperación" tras lo sucedido.