Galería: Shakira, la artista del momento
Shakira fue feliz en España, pero también muy desgraciada. Por eso, una vez solucionó el tema de la custodia de sus hijos y dejó todo arreglado, se marchó a Miami para iniciar una nueva vida con Milan y Sasha y muy lejos de Piqué. Eso sí, tiene que volver a España, al menos para su juicio por fraude fiscal, que es espera que tenga lugar el 20 de noviembre de 2023 en Barcelona.
Antes de que llegue ese momento se ha filtrado en El País una declaración de la cantante, que habló durante 80 minutos en el juzgado para dejar claro que es inocente de este caso en el que se le acusa de haber defraudado 14,5 millones de euros a Hacienda por no haber tributado entre 2012 y 2014, cuando el erario público considera que vivía de forma permanente en España y por tanto tenía que pagar sus impuestos en este país y no en Bahamas.
La cantante y sus abogados han trabajado para demostrar que Shakira no fue residente fiscal en España en ese tiempo, y así evitar ser declarada culpable en este juicio en el que se enfrenta a 8 años de cárcel y a 23 millones de euros de multa, que es lo que solicita la Fiscalía para ella por fraude fiscal.
Shakira ha señalado que desde 2011 pagó impuestos por valor de 90 millones de euros a Hacienda, a quien acusa de desmedido afán recaudatorio y de querer usarla como figura ejemplarizante. La clave de todo es que Shakira argumenta que hasta 2015, sus visitas a España eran esporádicas y que por tanto no tenía que pagar a Hacienda durante esos años por mucho que llevara con Piqué desde 2010 y que hubiera tenido a su hijo mayor en Barcelona en enero de 2011.
"Señoría, no conozco a nadie que esté en un proceso penal por tener novio", expresó Shakira, que señaló que no podía fijar residencia debido a la carrera de Piqué, que no sabía dónde acabaría viviendo. Otras frases de su declaración hacen referencia a la inestabilidad de su relación con el exfutbolista en sus primeros años: "
"Era una nómada, una persona sin raíces ni estabilidad. He viajado a un ritmo tan intenso que he llegado a estar en tres países en un mismo día. Estados Unidos fue mi trampolín al resto del mundo y es mi centro de negocios. Bahamas me daba una privacidad que no encontraba en otro país y tenía la ventaja de estar a 20 minutos de Estados Unidos", señaló además, recordando que tenía un permiso de residencia permanente en Bahamas, aunque reconoce que en aquellos años viajaba mucho por su relación con Piqué y sus compromisos profesionales en Estados Unidos: " Empiezo a salir con él y, si tengo un poco de tiempo libre, prefiero ir a verlo a él y no ir a Bahamas a encontrarme a mi ex. Era una situación que no le hacía nada de gracia a Gerard. Entonces, por apaciguar un poco los celos de Gerard, que eran naturales porque no teníamos una relación consolidada, había mucha inseguridad por ambas partes y las heridas con mi anterior pareja estaban abiertas".
Lo que cambió todo
"Durante el embarazo, y es difícil de entender, trabajaba 14 horas al día. Programé la cesárea porque tenía un contrato con 'The Voice'. Es una visión retrógrada y algo machista pensar que, porque una mujer tiene un hijo con un español, hay que asumir automáticamente el concepto tradicional de familia. Yo compro casas en lugares y eso para mí no supone un compromiso", expresó Shakira, que no comparte el argumento de que haber sido madre en España le llevara a ser residente permanente. "Me dijeron que para ser residente fiscal española tenía que pasar 183 días en España, cosa que no hice. Si alguien me hubiera dicho, en el minuto uno me hubiera hecho residente".
" Mi único vínculo era Gerard. Aquí no tenía más que un novio. No tenía ganas de venir a España. Es un país lindísimo, pero no es el epicentro de la industria de la música. Para mí estar en España es un sacrificio enorme para mi éxito profesional, porque no cuento con lo mejor en la producción artística, que está en Estados Unidos. Es como pedirle a Gerard ir a Barranquilla a jugar por el Júnior", añadió la artista, que dijo que " lo que me genera España en términos de negocios, de ingresos, es minúsculo, puede ser comparable con Turquía o Grecia".
Todo cambió en 2015. Ese año nació su segundo hijo, Sasha, también en Barcelona, y a partir de ese año Hacienda no tiene nada que reprochar a Shakira. Es en 2015 cuando Shakira sí dice haberse instalado de forma permanente en Barcelona: " Escolarizamos a Milan y las cosas cambian. En este momento somos una familia consolidada, aunque nunca seremos una pareja completamente convencional". No finalizó sin confesar lo mucho que le ha afectado este problema con la Justicia, el daño causado a su reputación y que para ella es más importante la dignidad que el dinero.