Mientras ella intenta retomar poco a poco su vida normal, algo que ha empezado a hacer tras viajar a Dubai junto a Scott Disick -allí ha apoyado a su amigo el maquillador Mario Dedivanovic, ha protagonizado una sesión de fotos y ha tenido varios encuentros con grupos de niños-, acaba de salir a la luz la durísima declaración que Kim Kardashian hizo a la policía tras sufrir el robo en París el pasado 2 de octubre.
Le Journal du Dimanche ha tenido acceso a esa declaración, tras la que la celebrity pidió por favor a las autoridades que le permitieran abandonar el país lo antes posible y poder reunirse con sus hijos y su marido Kanye West.
"Escuché ruidos detrás de la puerta, como pasos, y grité preguntando quién estaba allí, pero nadie contestó. A las 2:56 llamé a seguridad, pero nadie contestó. Vi llegar a dos personas acompañadas por el hombre de la recepción, que lo tenían atado", comenzó diciendo.Entonces explicó que entraron a su habitación dos personas, una de ellas vestida de esquiador y otra de policía. Ambos preguntaron por sus joyas y le pidieron en concreto un anillo de diamantes valorado en 4 millones de dólares: "Le dije que no sabía y él sacó una pistola. Le señalé que estaba sobre la mesilla. Se mantuvo apuntándome con el arma mientras cogía la joya y preguntaba por el resto de cosas ".
Recorrieron junto a Kim Kardashian parte de las estancias del apartamento antes de volver a llevarla a su dormitorio, donde fue maniatada con cables y cinta adhesiva: " Me pusieron cinta adhesiva en la boca y también en las piernas antes de llevarme al baño y meterme en la bañera".
Kim pidió salir de París y volver a casa lo antes posible
Y mientras ella estaba allí los ladrones se hicieron con un importantísimo botín al descubrir el joyero : "En mi joyero había dos brazaletes de Cartier de diamantes; un collar Jacob en oro y diamantes; y dos pares de pendientes de diamantes de Lauren Schwartz y Yanina. Había también tres collares Jacob de oro, un collar de Lauren Schwartz cubierto en diamantes y otro con seis diamantes. Un collar nuevo con el nombre de mi hijo en diamante. Otro collar Jacob con una cruz cruzada, un reloj Rolex y dos sortijas de oro amarillo", fue el recuento que hijo la celeb a la policía, valorando todo en unos 6 millones de dólares.
Tras hacerse con todas esas joyas los asaltantes huyeron con un botín que finalmente se ha valorado en unos 9 millones. Por el momento se desconoce dónde ha ido a parar toda esa mercancía, pero la policía está en plena investigación. De hecho recientemente fueron detenidas 16 personas, entre ellas el chófer de la empresa de transporte que siempre usa la familia Kardashian cuando viaja a París -horas después de conductor fue puesto en libertad sin cargos-.