No ha sido fácil, pero por fin David Villa pudo volver a salir al campo a defender los colores del Fútbol Club Barcelona, su equipo, que ha confiado en él para volver a hacer lo que mejor sabe hacer y que tantas alegrías le ha dado a lo largo de su vida: jugar al fútbol.
Solo fueron 20 minutos los que Tito Vilanova dejó que Villa jugar a, pues todo debe ir poco a poco, pero sirvieron para que el asturiano marcara un gol que supo a gloria al equipo, a la afición y como no al propio Villa, que sentenció el partido contra la Real Sociedad 5-1.
Una tarjeta amarilla para David Villa
Además, el futbolista guardaba una sorpresa, pues en la celebración se quitó la camiseta de su equipo para lucir aún más especial, una en la que aparece una foto de su mujer y sus dos hijas que señala: "Imposible sin vosotras".
Este sincero homenaje a las mujeres de su vida le costó una tarjeta amarilla, aunque fue un peaje pequeño con tal de rendir un tributo a su esposa Patricia González y sus hijas, las pequeñas Zaida y Olaya, que aparecen abrazadas y muy sonrientes.