El futbolista ha vuelto a su país en avión privado para estar cerca de su madre en un momento delicado para ella.
Cristiano Ronaldo ha estado muy preocupado por el estado de salud de madre, por eso en cuanto ha podido ha regresado a Madeira para estar cerca de ella después de que sufriera un ictus. Dolores Aveiro continúa ingresada en el Hospital Nélio Mendonça de Funchal, pero su hijo, acompañado de Georgina Rodríguez y de su hijo mayor, Cristiano Ronaldo Junior, han sido vistos en el aeropuerto de la cuidad.
Y el día fue muy intenso para el futbolista, puesto que primero jugó un partido con la Juventus para después hacer las maletas y marcharse en su avión privado. Esta ha sido la segunda vez en una semana que ha viajado a su isla natal y todo por el estado e salud de madre, además ha sido acompañado por las mismas personas, solo que a este viaje parece que se han sumado por pequeños de la familia, Mateo, Eva y Alana Martina. La madre del luso ha permanecido en observación desde que fue operada y ella misma envió un mensaje trasquilador a través de sus redes sociales. Del mismo modo su pareja, Jose Andrade, comunicó cómo se encontraba, haciendo saber que la familia estaba muy unida en una situación algo delicada para ellos.
Se toma el coronavirus con humor
Hasta el próximo compromiso profesional, Cristiano Ronaldo tiene varios días libres, y más teniendo en cuenta la situación que se está viviendo en Italia a consecuencia del coronavirus y su rápido contagio en el país en el que viven. Por lo pronto, en muchas zonas del país han cerrado las escuelas y en cierto modo se ha paralizado la vida con el fin de que pare de contagiarse gente y por ende morir.
Este virus ha repercutido a los partido de fútbol disputados puesto que se han hecho a puerta cerrada para que en dichas aglomeraciones de personas no tenga lugar ningún contagio. Parece que Cristiano Ronaldo se ha tomado esto con humor ante la ausencia de aficionados, puesto que a su salida del partido ha pasado por la fila donde normalmente se colocan saludando a la nada, haciendo que chocaba las cinco como ocurre otras tantas veces.