Fue en julio de 2019, cuando Cristiano Ronaldo decidió ir a un despacho de abogados de Lisboa para poder cambiar e incluir a su pareja en su testamento. Aunque en su testamento, como ha podido saber Look, los que mejor salen parados son sus cuatros hijos, la modelo tampoco está muy abajo en la escala. Georgina Rodríguez recibiría la casa del futbolista que tiene en la urbanización La Finca de Madrid, siendo una de las propiedades más valiosas del astro portugués. Una mansión, obra del conocido arquitecto Joaquín Torres, que está valorada en casi 8 millones de euros y consta de 950 metros cuadrados habitables y más de 4.000 de parcela.
Un cambio muy pensando ya que, desde aquel 2017 cuando comenzaron, ha llovido mucho. Y ambos han formado una familia, teniendo en común una hija. Incluso, el jugador de fútbol relevó hace unos pocos de días su intención de pasar por el altar en un futuro cercano con la modelo de Jaca. "El sueño de mi madre es llevarme al altar cuando me case con Georgina", unas palabras que cogen más fuerza al conocer la noticia de incluirla en su herencia.
Un hombre generoso y de familia
Dejando a un lado imagen que transmite de chulo y prepotente dentro de los terrenos de juego, el crack portugués está siempre dispuesto a ayudar a todos los de su entorno. Y es que el portugués ha preparado también todo para que sus hermanos Elma, Katia y Hugo, dispongan de una importante suma de dinero, al igual que también para sus sobrinos. La máxima prioridad de Ronaldo es que toda su familia tenga todos los recursos necesarios para que puedan tener una buena vida.