Mientras que Cristiano Ronaldo y Georgina Rodríguez han disfrutado de la gala de los Premios The Best Fifa 2017 celebrada en Londres, la prensa lusa ha sacado a relucir que el futbolista podría haber sido infiel a su chica. La revista portuguesa TV Guia asegura que el jugador habría mantenido un breve romance con Natacha Sofía, una joven de 21 años.
La chica es conocida en Portugal por su paso por 'Love on Top', un programa de televisión muy parecido a 'Mujeres y Hombres y Viceversa'. Natacha Sofía asegura que contactó con él a través de Instagram y que desde el principio tenía la intención de mantener relaciones con él. Mediante dicha red social mantuvieron conversaciones subidas de tono, y ha dicho: "Decidí mandarle un mensaje privado por Instagram. No escondo que siempre fue con la intención de tener relaciones con él. Me sorprendió mucho, no creo que sea gay".
Al parecer, intentaron quedar en dos ocasiones, pero fue en la tercera cuando por fin consiguieron verse. Según cuenta la joven, se vieron en un hotel y allí comenzaron a besarse. después pasaron la noche juntos en una habitación y a la mañana siguiente el jugador le dio 300 euros para que se pagara el taxi. Después de este breve encuentro la bloqueó a través de las redes y no han vuelto a contactar: "Nunca más hablamos, me siento abandonada", ha dicho aunque no ha aportado ninguna prueba.
Distancias bien marcadas
Con todo este revuelo, el futbolista ha publicado una imagen con Georgina Rodríguez sosteniendo el premio que se ha llevado en la gala The Best y ha añadido un corazón. Mientras tanto, cada vez queda más claro la distancia que existe entre la oscense y Dolores Aveiro, que no deja de hacerle el vacío. Han sido varias las ocasiones en las que se ha visto cómo la madre de Cristiano Ronaldo y también sus hermanas se sientan lejos de ella, la última vez en el partido del Real Madrid contra el Eíbar. Eso sí, en la gala The Best posaron juntas en el escenario en una foto familiar tras ganar Ronaldo uno de los trofeos.
Esta no sería la primera vez que Dolores Aveiro se lleva mal con la novia de su hija, porque lo mismo pasó con Irina Shayk, quien no tragaba a su familia política después de que su suegra intentara controlar la vida de Cristiano Ronaldo.