Jessica Brown-Findlay es una actriz británica que logró conquistar al mundo con su papel de Lady Sybil Crawley en la prestigiosa ficción británica 'Downton Abbey'. A pesar de que solo formó parte de la serie durante las tres primeras temporadas, su personaje logró calar hondo entre los más incondicionales de la ficción. Ahora bien, aunque este papel fue el que la llevó a lo más alto, lo cierto es que la joven llevaba desde muy pequeña ligada al ámbito artístico, concretamente al ballet, una pasión que por una lesión tuvo que abandonar y que la llevó a explorar su faceta interpretativa.
Jessica Brown Findlay en la alfombra roja de los Premios Bafta 2017La joven actriz nació en 1989 en Cookham, un pequeño pueblo de Reino Unido ubicado en el Condado de Berkshire. Lo hizo en el seno de una familia humilde en el que su madre trabajaba como asistente de enseñanza y su padre como asesor financiero. "Crecí allí, al igual que lo hizo mi madre. Es un lugar muy familiar e increíblemente especial para mi corazón, es maravilloso", declaraba la joven actriz en 2012 durante una entrevista a la revista Vanity Fair.
Un futuro prometedor como bailarina
Siendo apenas una adolescente, Brown-Findlay formaba parte de una de las escuelas más prestigiosas de ballet clásico de Reino Unido, la Royal Ballet School. Con solo quince años recibió una invitación para bailar nada más y nada menos que con la compañía de ballet Mariinsky de San Petersburgo. Con ella tuvo el privilegio de bailar durante un verano entero en la Royal Opera House de la capital británica y ampliar así su formación y curriculum como bailarina clásica.
Reparto de Downton AbbeyMientras tanto, la joven seguía con sus estudios como cualquier otra niña de su edad en una escuela de Berkshire hasta que, terminada su formación secundaria, decidió seguir con su educación en un centro que le permitiera seguir con su aprendizaje sobre los escenarios. De manera que, siendo muy joven se trasladó a Londres para asistir a la Arts Educational School, un centro especializado en el mundo artístico por cuyos pasillos ya habían pasado rostros de gran calado como Julie Andrews, Samantha Barks o Gary Carr.
Jessica Brown-Findlay tuvo que pasar por numerosas operaciones en el tobillo durante su segundo año en esta escuela, pero desafortunadamente la última de ella no salió como esperaban ni ella ni los médicos y el resultado frustró para siempre sus expectativas de convertirse en bailarina clásica profesional. "Yo estaba enamorada del ballet, lo era todo en mi vida", confesó años después la actriz.
Gracias al apoyo de algunos de sus profesores en el centro artístico, la joven se repuso del duro palo que supuso tener que abandonar su sueño de toda una vida y, una vez terminados sus estudios en el mencionado centro, se matriculó en la universidad, donde descubrió la interpretación. Precisamente en una entrevista, la actriz afirmó que al comenzar su formación como actriz descubrió que aquello que más echaba de menos del ballet no era tanto el baile (que por supuesto), sino la interpretación que debía llevar a cabo cuando se subía sobre un escenario.
'Downton Abbey', la serie que la encumbró
Encontrada una nueva disciplina en la que focalizar su carrera, Jessica Brown-Findlay logró su primer papel como actriz, y en la gran pantalla, en la película 'Albatross'. Ahora bien, el momento más importante de su carrera le llegaría precisamente mientras rodaba el mencionado largometraje, ya que supo que había sido seleccionada para interpretar a Lady Sybil Crawley, en 'Downton Abbey'.
En la ficción encarnaba a la pequeña de tres hermanas, interpretadas las otras dos por Laura Carmichael y Michelle Dockery, hijas de un Lord que, acostumbradas a su acomodada posición deberán ver cómo su casa no puede permanecer ajena a los problemas que afectaban a la sociedad de principios del siglo XX, como por ejemplo con la Primera Guerra Mundial. En la pantalla, la actriz se metió en la piel de una joven fuerte, idealista y avanzada a su época que renunció al lujo para luchar por la igualdad y vivir su romance con Tom Branson, el chófer de la familia Crawley.
La modernidad del personaje o la autenticidad que transmitía en cada una de sus apariciones encumbraron a Jessica Brown-Findlay a lo más alto de la industria, llegando incluso a ser galardonada por el Sindicato de Actores, junto con el resto del reparto. Ahora bien, la tercera temporada de la serie marcaría un antes y un después tanto en la intérprete como en el argumento, ya que la actriz ponía fin a su participación en la serie desapareciendo así uno de los personajes más queridos del drama británico. "Jessica había dicho que se iría desde el principio. Ella dijo: 'Haré tres años y luego lo dejaré', por lo que todo estaba pensado", declaró el creador de la serie tras la polémica suscitada por su marcha.
Una trayectoria en alza
Si bien es cierto que la joven actriz abandonaba la serie que poco a poco fue ganando más adeptos y que continuaría tres temporadas más en antena, lo cierto es que la carrera profesional de Jessica Brown-Findlay no se ha quedado atrás en lo que a éxito se refiere. Cabe destacar que todavía no ha logrado el papel protagonista que de nuevo la haga destacar a nivel mundial, de la misma forma que sí lo lograra con Lady Sybil, pero lo cierto es que tampoco ha dejado de trabajar año tras año en importantes proyectos.
Jessica Brown-Findlay y Lena Dörrie de la miniserie 'El Laberinto''Black mirror', 'Labyrinth' o 'Winter's Tale' han sido algunas de las producciones en las que ha participado la intérprete, donde además ha compartido protagonismo con otros grandes nombres del mundillo como Russell Crowe o Collin Farrell. No obstante, en 2017 le llegaría su segundo papel protagonista en la pequeña pantalla de la mano de Charlotte Wells, el personaje al que da vida en la ficción británica, 'Harlots'.
Víctima de un hacker informático
La actriz es una persona muy reservada en el plano personal, pero involuntariamente en 2014 su nombre salió al primer plano mediático cuando un hacker filtró unas fotos y vídeos íntimos del móvil de la joven en numerosas plataformas de Internet. Lo cierto es que ella no fue la única, pues otras muchas actrices y cantantes de renombre internacional (como Rihanna, Amber Heard o Kim Kardashian) también fueron víctimas de este ataque informático.
Jessica Brown-Findlay y su novio, Ziggy Heath en una manifestación/Foto:Instagram
