La tragedia se cebó con el mundo de la tauromaquia el 26 de septiembre de 1984. Una de sus más grandes figuras, Paquirri, fallecía tras sufrir una tremenda cogida en la cordobesa Plaza de Toros de Pozoblanco, dejando un vació gigante en el corazón de todos sus seguidores. Por desgracia, no fueron sus fans los únicos que tuvieron que lamentar esta histórica pérdida, sino que el diestro se marchó dejando huérfanos a tres pequeños que nunca podrán olvidarle.
Se trata de los dos hijos que tuvo con Carmina Ordóñez, Fran y Cayetano; y el vástago fruto de su relación con Isabel Pantoja, Kiko. Los hermanos Rivera tuvieron que crecer sin la figura de su padre y eso ha sido algo que siempre les ha pesado. Por eso, todos y cada uno de ellos han querido rendir un homenaje a Paquirri por el 34º aniversario de su muerte. Su primogénito ha sido el primero en publicar una imagen posando con él en sus redes sociales, acompañada de un emotivo y corto mensaje que habrá saltado las lágrimas de más de uno.
"Nada papá, nada que no hablemos cada día, solo que hoy algunos se acuerdan más de ti, yo no", apuntaba el diestro junto a la tierna postal, en la que aparece de muy pequeño reposando en los brazos de Paquirri. Poco después, Cayetano Rivera compartía un retrato de su progenitor a través de su cuenta de Facebook, haciendo hincapié en que han pasado 34 años desde que perdió la vida. El último en homenajear al torero ha sido el hijo de Pantoja, que ha dejado claro que no hay un día que no se acuerde de él con una antigua instantánea en la que posa descansando sobre el regazo de la leyenda del toreo. "Siempre en mi pensamiento y en mi corazón", escribió.
Recuerdo en el cementerio
Del mismo modo, la tonadillera ha querido enviar una corona de flores al sepulcro de Paquirri en Sevilla, en su nombre y en el de su hijo. La hermana del torero, Teresa Rivera, tampoco se ha olvidado de esta fecha tan señalada y ha colocado otra guirnalda sobre la tumba en la que descansan los restos mortales del hombre que, incluso antes de morir, ya se había convertido en leyenda de la tauromaquia.