Payne fue el primero en romper el silencio y habló de como se sentía con la ruptura: "Estoy bien, a veces me siento un poco frágil. Pero estoy bien". Ahora, Cheryl ha concedido una entrevista al medio estadounidense Daily Mail, donde ha desnudado su alma y ha hablado del duro momento emocional por el que está pasando. "Odio las bajadas. Es una de las cosas que nos hace no querer involucrarnos en una relación. Nada más te hace sentir así", asegura la cantante. "Sé que tienes que asumir los momentos buenos y los malos, así que estoy trabajando en ello", añade.
Además, la cantante ha querido dejar claro que no tiene prisa por volver a enamorarse y que no es algo que esté entre sus planes a corto plazo: "No diría que me he rendido en el amor. Me encanta amar, pero he dejado en pausa mis relaciones. Está bien, me dejo llevar, pero no tengo planes de conocer a alguien en un futuro cercano", explica.
Sacrificios por un hijo
La parte más dura de la separación de la pareja de cantantes ha sido tener que hacer frente a una paternidad dividida. Ambos quieren lo mejor para su hijo, y están dispuestos a hacer lo que sea porque el pequeño crezca con sus dos padres en su día a día: "No hay ningún resentimiento hacia Liam. Es una relación sana, buena. Somos solo como cualquier pareja que ha pasado por esto, la diferencia es que tenemos más ojos sobre nosotros, atentos a lo que hacemos", explica, haciendo referencia a los miles de fans que siguen sus pasos.