Fue en octubre de 2010 cuando la joven llegó a la televisión para participar junto a su novio Rubén Estévez en la duodécima edición del programa de Mediaset. Pero no es la única vez que llegó a vivir en Guadalix, porque también lo hizo cuando concursó en 'El reencuentro' y finalmente en 'GH VIP 3', donde la gaditana protagonizó varias disputas con la colaboradora de 'Sálvame' Belén Esteban.
"Vivir con ella fue una tortura. No conozco persona más egocéntrica. Belén está acostumbrada a tener todo lo que quiere, a ser la protagonista allá por donde va y a que nadie le diga absolutamente nada. Se cree que está por encima del resto y que su opinión es la que impera. Y yo no iba a hacer lo que ella quisiera. Estaba claro que mi presencia no le iba a gustar", ha asegurado la joven durante la entrevista para después añadir: "Realmente no puedo comprender cómo alguien puede apoyar a una persona maleducada, inculta y que encima se enorgullece de ello. También te digo que creo que ha perdido mucho apoyo desde su participación en 'GH VIP'. Pero bueno, ella tiene un público muy fiel que la apoya haga lo que haga".
En relación con ello, la joven añadió que la victoria de Belén Esteban fue "evidentemente injusta" porque en el programa "debería premiarse la convivencia y el compañerismo y, en eso, no ganaba ni por asomo". "Ella quiso abandonar casi desde la primera gala y eso no es vivir la experiencia con ganas", ha apuntado a la vez que dejaba constancia de que no era una mala persona y "cuando hemos coincido después de 'GH VIP' hemos tenido un trato cordial".
Su nueva vida como funcionaria
Entre sus declaraciones, Chari Lojo ha confesado que ahora es funcionaria de prisiones en Ibiza: "Decidí opositar para tener una estabilidad económica. En el mundo de la televisión se gana dinero, pero un día te llaman y luego ya no. Realizamos una labor fundamental en la sociedad y muy poco reconocida. Es un mundo oculto y muy interesante que a todo el mundo le provoca curiosidad. Es una de las mejores decisiones que he tomado, estoy contenta."
La funcionaria ha sorprendido revelando un complicado momento que vivió junto a su pareja, también funcionario, durante el trabajo: "Yo era la que tenía que dar la voz de alarma a la más mínima actuación en la que alguien corriera peligro. Y viví algo así con Agustín, mi novio, que trabaja conmigo. Un módulo entero se rebeló contra él tirándole objetos y casi llegan a realizar un motín. En las prisiones hay módulos de convivencia pero también hay módulos de aislamiento, de nocivos y estos son arena de otro costal. Se afrontan situaciones de mucho riesgo. Finalmente, todo se solucionó, pero fueron momentos de mucha tensión y miedo", ha contado dejando claro que ahora está muy feliz con su puesto de trabajo.