El pasado 11 de octubre, en plenas fiestas del Pilar, Cayetano Rivera sufría una grave cogida cuando un toro le embistió con violencia, causándole una cornada en el muslo. Desde entonces, el torero ha estado ingresado en el hospital Quirón de Zaragoza, donde fue operado de urgencia.
Eva González, embarazada de cuatro meses, no tardó en desplazarse a la ciudad aragonesa para estar cerca de su marido, y acompañarle y apoyarle en todo momento. El diestro ha abandonado finalmente el hospital este domingo 15 de octubre, tras recibir el alta médica y poder continuar la recuperación en su casa.
"Me siento mejor. Lo peor son las primeras horas y las primeras noches. Afortunadamente la herida ha ido evolucionando favorablemente ", revelaba Rivera a la salida del hospital, acompañado por las muletas y el doctor Val-Carreres responsable de su operación, a los medios allí presentes.
Además, el torero ha manifestado su deseo de repetir en los festejos del Pilar del año que viene: "Aragón tiene una gran afición y ferias muy importantes. Estoy feliz cada vez que piso esta tierra y el año que viene quiero volver y completar la faena en Zaragoza ".
El duro momento de Eva González
Cayetano Rivera también ha tenido unas bonitas palabras para su mujer. El hermano de Fran Rivera ha reconocido los días tan difíciles que ha tenido que pasar Eva González y que a pesar de ello, la presentadora nunca le ha pedido que deje los toros: "Han sido días difíciles para Eva. No me ha planteado que deje los toros. Ella sabe que es una decisión personal. Lo único que siempre me ha pedido es que corra los menos riesgos posibles ".
Durante estos días, el torero se ha mostrado en todo momento agradecido por los ánimos de sus seguidores, aunque también quiso dedicar a través de su cuenta de Twitter unas palabras a todos aquellos que se habían alegrado de su cogida: "Y a todos aquellos que os habéis alegrado por mi dolor o me habéis deseado la muerte, gracias también, porque eso sólo me hace más fuerte".