El culebrón del desahucio de Aramis Fuster suma y sigue. La vidente fue despojada del piso que había alquilado en Berga por una deuda que tenía con los dueños del piso que ascendía a 6.000 euros tras 15 meses de presuntos impagos.
Casoavila ratifica que Fuster se fue sin pagar 15 mensualidades, lo que arroja una cifra de 6.000 euros, y que al marcharse de la casa no solo habría dejado una escoba voladora, sino que selló habitaciones con silicona y estropéo muebles y puertas con un espray rosa, además de dejar la casa hecha una pocilga. Además, asegura que Aramis miente y que es todo un montaje.
Acoso y despecho
Por su parte, la mediática vidente aseguró que la razón de su desgracia es que su casera se había encaprichado de ella y le había acosado sexualmente: "Es la venganza de una "señora", denunciada por mí ante los Mossos d'Escuadra por ACOSO SEXUAL. Mi casera se encaprichó de mí. Me llamaba a todas horas, venía a casa de madrugada. Pero no soy lesbiana. Entonces descubrí que el despecho puede ser horrible".