Galería: Funeral de la madre de Carmen Lomana
La muerte de Fefa llenó de dolor a su familia, sobre todo a sus cuatro hijos. Todos ellos acudieron al funeral y al posterior entierro de María Josefa Gutiérrez García. Primero fue la misa corpore in sepulto celebrada en la iglesia de San Marcelo de León, y después, todos se trasladaron al cementerio municipal de la capital leonesa para darle cristiana sepultura.
Allí quedaron patente las diferencias entre los hermanos Carmen y Rafa. Ambos estuvieron muy cerca, apenas a un metro, uno enfrente del otro, pero sus diferencias pesaron más y ni siquiera se miraron. Nuevamente se puso de manifiesto su mala relación en el entierro, en el cementerio de León, ya que cada uno estuvo por su lado. Él con su mujer, y ella con sus hermanos.
En lo que sí coincidieron es en su educación ante la prensa que se desplazó a León para cubrir el funeral. El aventurero no dudó en responder a algunas preguntas y en comentar cómo se encontraba: "Estoy pasando este trance, pero tengo la satisfacción y alegría de que mi madre es lo más grande que he tenido en la vida y se va tranquila, descansa en paz. Ahora a guardar su memoria y su recuerdo, que es lo más importante".
¿Hermanos unidos?
En cuanto a sus diferencias con sus hermanos, le ha quitado importancia en un día como aquel, por lo que aunque fuera cada uno por su lado, parece que hubo tregua: " Los hermanos unidos, hay que apartar todo, ahora estamos a dar sepultura y entierro a mi madre".En el caso de Carmen Lomana, se mostró muy afligida pero entera y dio las gracias a la prensa por cómo le habían tratado tanto a ella como a su familia: " Muchísimas gracias. Habéis estado muy bien, muy discretos".
Pese a que mantuvo la compostura en todo momento, la celebrity se vino abajo en su ciudad natal al recordar que no solo su madre yace en el cementerio de León, sino que su querido marido Guillermo también está enterrado allí: "Para mí es muy duro porque mi marido también está aquí enterrado".