Francisco no pasa por su mejor momento. El cantante tuvo que sentarse este miércoles 16 de enero en el banquillo de los acusados por un presunto delito de estafa de 80.000 euros en la compra de un coche de lujo. Después de ofrecer su versión de los hechos, el juicio está visto para sentencia.
Francisco se mostró muy tranquilo a lo largo del juicio
Sin embargo, la crisis del ladrillo motivó que estas propiedades no se vendiesen generando una deuda al artista, que vendió este vehículo para comprar otro aún más costoso. Por ello, el Fiscal solicita una pena de tres años y seis meses de prisión para Francisco -condena que ha elevado a cinco la acusación particular al entender que hubo agravante de abuso de confianza-.
Por su parte, la defensa del artista ha pedido la absolución en un juicio en el que Francisco se ha mostrado muy tranquilo durante las tres horas y media que ha durado la vista. El cantante contestó a todas las preguntas que se le hicieron, mientras que Andrés Ballester fue menos claro, no recordando algunos datos sobre los que fue preguntado alegando que ha pasado demasiado tiempo. Ahora el Juez tiene la última palabra.