El actor está dispuesto a ignorar cualquier comentario negativo que tenga que ver con su relación con la presentadora italiana.
La ausencia de Can Yaman de en las redes sociales consiguió despertar numerosos rumores, uno de ellos que quizás el motivo del descenso de su actividad en Instagram podría deberse a su ruptura con Diletta Leotta, pero sus seguidores no estaban en lo cierto, puesto que al poco tiempo volvió a mostrarse activo, aunque no por mucho tiempo.
Uno de los motivos por los que el actor turco quizás ha decidido frenar sus publicaciones en Instagram es para poder vivir su día a día con mayor intensidad y sin hacer caso a ciertos comentarios que estarían fuera de lugar. Cabe destacar que cuando ha publicado imágenes con su chica ha preferido desactivar los comentarios para ahorrarse tener que leer insultos o comentarios negativos sobre lo que para él está siendo un momento muy especial en su vida. Hasta tal punto llegaron los rumores de problemas en la relación que fue la propia Diletta Leotta la que quiso tomar cartas en el asunto, publicando en las redes sociales que estaba cansada sobre las especulaciones sobre su vida privada, poniendo en entredicho su relación, vinculándola a otros hombres de manera equivocada y desvirtualizando la realidad. La presentadora deportiva lo que no matizó es si está dispuesta a casarse con Yaman después de que se dijera que le había pedido matrimonio, no obstante, y en vista de las circunstancias, seguro que procuran ser discretos.
De momento continúan disfrutando de su relación a pesar de que no lo hagan de la manera más íntima posible. La revista italiana Chi ha compartido unas imágenes de la pareja durante una escapada romántica de la pareja. En ella aparecen en la terraza de un hotel ubicado en el lago Como, uno de los lugares más atractivos de Italia, y en estas estampas aparecen en bikini y bañador, arropándose el uno al otro entre toallas, abrazándose y sin parar de ser cariñosos. Centrado en la vida real
En vista de la actitud del actor, parece que ha decidido alejarse de todo aquello que le hace daño o le afecta, en concreto de las redes sociales, para centrarse en su vida real, sin hacer caso a todo lo que se llega a decir tanto de él como de su chica.