La cantante ha solicitado poder librarse de su padre de una vez por todas después de trece años bajo su tutela.
Britney Spears ha comparecido ante la jueza para solicitar poner fin a la tutela por parte de su padre sobre ella, algo que se ha extendido durante 13 años que califica como 'abusivos'. La cantante ha usado esta comparecencia para reivindicar sus derechos y para dejar claro que quiere recuperar su vida de una vez por todas. "No estoy contenta. No puedo dormir. Estoy enfadada y deprimida. Lloro todos los días", ha dicho de manera muy dramática en un testimonio a través de la aplicación Zoom mediante videollamada.
Desde 2008 su padre, Jamie Spears, junto a un fideicomiso, ha supervisado por decisión judicial desde las finanzas hasta la parte más personal de la cantante desde que esta sufrió un colapso nervioso. Y sin morderse la lengua ha dicho: "Señoría, mi papá y todos los involucrados en esta custodia, incluida mi manager, que tuvo un papel clave en mi castigo... deberían estar en prisión". Tan enfadada está que ha amenazado con demandar a su familia por lo que ha hecho. Por otro lado, y debido a que se trataba de una videollamada, el abogado de Spears, Samuel Ingham, ha dicho que el testimonio de su clienta no fue editado, filtrado ni controlado. "Antes creía que nadie me iba a creer. Creía que la gente se burlaría de mí. Pero ahora quiero recuperar mi vida. Ha sido suficiente", ha dicho con contundencia y decisión.
A su vez, ha hecho saber que siente que de esta manera no puede avanzar y que incluso le gustaría volver a ser madre: "Me gustaría avanzar progresivamente y quiero tener un trato real, quiero poder casarme y tener un bebé. Me dijeron en este momento en la tuteal que no puedo casarme ni tener un bebé, tengo un DIU dentro de mí en este momento para no quedarme embarazada. Quería sacar el DIU para poder empezar a intentar tener otro bebé. Pero este supuesto equipo no me deja ir al médico a sacarlo porque no quieren que tenga hijos, más hijos. Básicamente, esta tutela me está haciendo mucho más daño que bien".Cansada de la tutela
La última vez que Britney Spears tuvo la oportunidad de comparecer ante un juez fue em mayo de 2019, haciendo saber que el acuerdo de tutela le parecía demasiado riguroso. Denunció públicamente que su padre la obligara a internarse en un centro de salud mental y que incluso tuvo que cantar en un concierto a pesar de estar enferma con fiebre. Ahora ha dicho: "Me obligan a ir tres veces por semana a un psiquiatra", ha dicho este miércoles. La cantante ha afirmado ante el tribunal que quiere reducir su tiempo con el psicólogo a una sesión por semana, ya que no cree en la terapia: "Siempre he pensado que puedo llevar mis problemas a Dios".