Britney Spears lleva saliendo tan solo cuatro meses con su novio Charlie Ebersol, pero la artista, de 33 años, ha dado a entender que, a pesar de su corto noviazgo, podrían sonar campanas de boda en el futuro.
Durante su última entrevista para Extra, cuando Pauly D le hizo la pregunta de si se veía pronto a si misma dentro de una capilla de Las Vegas, la estrella del pop respondió tímidamente: "Nunca se sabe". Y es que Spears no solo no lleva de forma privada su estrecha relación con el productor de televisión, sino que desde el principio grita a los cuatro vientos lo que siente por su nuevo amor.
Durante el concierto que dio el pasado mes de enero en el Planet Hollywood Las Vegas Resort & Casino, la cantante lució un 'I love Charlie' en la parte posterior de su vestuario. Spears también ha contado la reacción de su novio a esta muestra pública de cariño.
"El dijo: 'Eres la novia más dulce del mundo entero', estaba realmente feliz por lo que hice", comenta la artista. Además el entrevistador también tenía un bonito mensaje del productor para su novia, que dijo que era "afortunado de estar con ella", cuando acudió a Universal Studios para hablar con Extra.
Charlie Ebersol, uno más de la familia Spears
"Es una bendición tenerle como parte de mi vida, eso es muy bueno", respondió Britney Spears, que a menudo comparte momentos de esa vida en común en su cuenta de Instagram.
Precisamente a través de esta red social, la cantante muestra la buena relación entre su pareja y sus dos hijos, fruto de su relación con el exbailarín Kevin Federline. Habitualmente publica instantáneas familiares en las que aparecen los cuatro disfrutando de tiempo juntos en Las Vegas, en la playa, en Los Angeles, nadando con delfines...