Hace algunos días ya se dejó ver en las gradas de algún partido de Wimbledon, pero no podía faltar a su cita con la gran final. Kate Middleton y su marido el Príncipe Guillermo de Inglaterra tomaron posiciones para no perderse ni un solo punto del encuentro que enfrentó a Andy Murray y Milos Raonic.
Entre ellas, además de los citados Duques de Cambridge, estaba otra pareja que acaparó muchas miradas: Irina Shayk y Bradley Cooper, que también se habían dejado ver por allí en días previos.
La encrucijada de Bradley Cooper en la final de Wimbledon
Y es que por allí, ocupando otro de los asientos, estaba Suki Waterhouse. La modelo se mostró de lo más relajada y feliz a pesar de que haberse tenido que encontrar con su ex y con la nueva novia de este.
Recordemos que, tras dos años de romance, Bradley Cooper decidió poner punto final a su romance con Suki Waterhouse dicen las malas lenguas porque no le apoyaba todo lo que él consideraba que debía apoyarle. Ni un mes después salieron las primeras fotos del actor muy acarameladito con Irina Shayk...