Cuando Michael Jackson falleció, le dejó una gran fortuna a sus familiares. Y aunque muchos de ellos lo han invertido en sus proyectos profesionales, Blanket Jackson, su hijo más pequeño, ha decidido comprarse una mansión valorada en 2 millones de dólares.
La casa se encuentra en Calabasas, una localidad de Los Angeles en la que es difícil distinguir la mansión más grande de la manzana. Sin embargo, el nuevo hogar de Jackson es destacable ya que cuenta con 600 metros cuadrados, seis habitaciones y una gran sala donde aparca sus coches y en la que está la piscina, el spa y barbacoa.
Asimismo, la mansión fue construida en 1990, por lo que tuvo que ser reformada en vista de que Jackson iba a comprarla. Es de estilo moderno con toques mediterráneos y tiene un gran jardín que separa a Jackson de sus vecinos, entre ellos, John Travolta y Jerry Seinfeld.
La puerta de entrada da paso a un inmenso salón, sala de estar y la cocina. Mientras que las escaleras de caracol conectan con la planta de arriba, donde se encuentran cuatro habitaciones con baño particular y un gimnasio lleno de las máquinas con los últimos avances en fitness.
Alejado de la fama
Blanket Jackson es el hijo menor y por lo tanto, ha sido el último en independizarse de sus hermanos. No obstante, también ha destacado por ser el único de la familia que se ha mantenido fuera del foco mediático que a su padre tanto le persiguió a lo largo de su vida.