Hace ya cuatro meses, desde que Blake Lively y su marido Ryan Reynolds se convirtieran en padres de una niña a la que llamaron James.
Cuando los presentadores le preguntaron sobre los cambios que había en su nueva vida ella dijo: "Bueno lo primero de todo, esto (refiriéndose a sus pechos) ha cambiado. Ves un balcón y estás como...¡Oh Dios mío!. El hotel necesita derribar este balcón porque mi hija puede aparecer cerca de ahí. Todo se intensifica mucho más. Estamos todo el día llorando sin razón alguna".
Blake Lively saca su lado más infantil tras la maternidad
También habló sobre sus recuerdos más bonitos de ella y su madre: "Ella siempre me sacaba del colegio y me llebava a Disneyland, el cual es un mal consejo (...). Pero era genial ver la imaginación de las personas de esa manera, eso te abre la mente. No sé, estoy intentando justiciar lo de ir a Disneyland".