Tal y como la propia Chyna ha hecho saber a través de un comunicado en sus redes sociales, por fin podrá demostrar que las Kardashian-Jenner son unas mentirosas y capaces de todo para salirse con la suya sin importarle perjudicar a cualquiera, ni siquier a la madre de su nieta y sobrina. "Cuando cancelaron mi exitoso reality número 1 ['Rob & Chyna'] en enero de 2017, eso no lo me afectó a mí financiera y emocionalmente, sino que también lo sufrieron mis hermosos hijos", reconoce la modelo.
"Las llevaré a los tribunales para que defiendan mis derechos y sea un ejemplo para mis hijos sobre 'lo que está bien está bien, lo que está mal está mal'. Y lo que ellas hicieron está muy mal", reconoce. "Estoy muy agradecida de que un jurado finalmente escuche lo que sucedió de puertas para adentro -las mentiras que se dijeron y el daño que se hizo-", acusa también.
Chyna quiere ser un ejemplo para sus hijos
Y es que con este mediático juicio Blac Chyna pretende demostrar que las acusaciones tanto de Rob Kardashian como de Kris Jenner de agresiones físicas por parte de esta nunca sucedieron y que se utilizaron como excusa para conseguir que los directivos de la cadena E! Cancelaran el spin-off de 'Keeping Up With The Kardashians' que estaba protagonizando por aquel entonces la pareja y que narraba como era su vida, con sus más y sus menos.
A estas acusaciones se suman también las de que Rob Kardashian compartió a través de sus redes sociales varias fotografías de Blac Chyna desnuda cuando pusieron fin a su relación sentimental a finales de 2016. Un hecho que sumaba también a la larga lista de presuntos ataques contra la modelo por denigrarla después de dejar a Rob Kardashian. Así lo recoge la demanda interpuesta por aquel entonces: "En venganza, la familia Kardashian-Jenner han empezado a ser unos depredadores mediáticos y le han hecho 'slut-shaming' [humillación hacia una mujer por su sexualidad] en redes sociales y acabando así con el exitoso show de televisión del que se acaba de empezar a rodar la segunda temporada".