Primero llegaron las reacciones de famosos e incluso de la Casa Real, que expresó su pesar y homenajeó al cómico en Twitter, además de enviar un telegrama de pésame a la familia de Chiquito de la Calzada. Después, el cuerpo sin vida de Gregorio Sánchez, que así se llamaba el humorista, fue trasladado a la capilla ardiente, situada en el Auditorio Egdar Neville de Málaga.
La familia veló toda la noche a Chiquito, a quienes se unieron amigos tan íntimos como Bigote Arrocet y Paz Padilla, los dos tristes por la pérdida y también por no haber podido pasar con él las últimas horas de su vida, ya que aunque mejoró, experimentó un empeoramiento y terminó falleciendo irremediablemente.
Este domingo 12 de noviembre tuvo lugar su funeral en la Iglesia de San Pablo de Málaga, templo que se quedó pequeño ante la avalancha de personas que quisieron dar el último adiós a un hombre de la talla de Chiquito de la Calzada, que en vida repartió sonrisas y cariño, y que ahora la gente ha querido corresponderle como se merece.
Entre ellos se vio una vez más a Bigote Arrocet, que a falta de María Teresa Campos, que no viajó a Málaga, estuvo arropado por Manolo Sarria. Los dos estaban terriblemente afectados y se les escaparon las lágrimas ante la pérdida de un gran amigo, que para Edmundo ha sido "uno de los grandes de su vida".
La andaluza contó con el apoyo, el cariño y el consuelo de su marido, Juan Vidal Agarrado, que pese a estar también afectado, se mantuvo más entero e intentó consolar a su mujer. Tras la misa, Paz Padilla recuperó el tono, e incluso colgó en Instagram una foto con los colaboradores de 'Genio y figura', el programa que dio la fama y el éxito a Chiquito de la Calzada en los años 90. Todos ellos se reunieron para decir adiós a un amigo.