María Teresa Campos continúa en Málaga junto a su pareja Bigote Arrocet. Allí permanece la presentadora desde que el pasado 27 de agosto tuviera que viajar con urgencia por la repentina muerte de su hermana Araceli, que falleció víctima de un cáncer de mama.
Tras darle el último adiós el pasado fin de semana, la presentadora ha decidido permanecer unos días más en Málaga para intentar tomar aire y superar poco a poco la terrible pérdida, que llegó cuando toda la familia creía que estaba en el camino de la recuperación.
Allí María Teresa Campos no se separa ni un instante de su pareja Edmundo Arrocet, que volvió rápidamente de Londres -donde pasaba unos días de vacaciones familiares- para estar junto a la presentadora y convertirse en su mejor consuelo.
María Teresa Campos, rota de dolor
En una de sus pocas salidas, la pareja decidió acercarse a la playa. Sin quitarse la ropa de calle, ambos estuvieron descansando en unas hamacas. Mientras el cómico leía un libro, la presentadora permaneció tumbada bajo el sol.
Tras un rato relajándose, la pareja decidió volver a casa. Entonces María Teresa Campos ocultó su mirada tras las gafas de sol, evitando que los medios captaran su rostro de desolación. Todavía tardará un tiempo en superar la pérdida.