Ben Affleck se ha convertido en una figura importante en Hollywood, no solo por su carrera cinematográfica sino también por su vida ejemplar, sobre todo en el ámbito familiar junto a su esposa, la actriz Jennifer Garner. El actor, que es padre de tres hijos, se ve envuelto en una polémica por culpa de una serie de e-mails hackeados a Sony y publicados por WikiLeaks el pasado jueves.
En el documental se puede ver un antepasado ocultista y a su propia madre, "decidimos apostar por la fascinante historia de su predecesor que se convirtió en ocultista tras la Guerra Civil. Era totalmente inusual", contó Gates, que también afirmó que había varios personajes públicos con un antepasado esclavista, y que no era algo tan inusual como para ser un tema tabú.
Donde dije digo, digo Diego
En el intercambio de e-mails se puede ver claramente la preocupación de Gates ante la petición de Affleck: "Aquí está mi dilema: por primera vez, uno de nuestros invitados nos ha pedido censurar algo sobre uno de sus antepasados. Cuatro o cinco invitados en esta temporada provenían de propietarios de esclavos. (...) Nunca nadie trató de censurar o editar lo que encontramos. Es una mega estrella. ¿Qué hacemos?", escribió el productor a Lynton.
Lynton le aclaró que le gustaría hacerlo pero todo dependía de si se sabía la información sobre los antepasados del actor, ya que en el caso de saberse la cosa se complicaría. "Una vez que abrimos la puerta a la censura, perdemos el control de la marca", confesó Gates, pero más tarde, durante el especial sobre Affleck no se mencionó nada sobre su antepasado esclavista. El nombre de Affleck no sale explícitamente en los e-mails sino con un sobrenombre del tipo "megaestrella" o "Batman". ¿A qué tiene miedo Ben Affleck?