Carmen Cervera es una mujer que se ha hecho a sí misma. Desde pequeña tanto ella como su madre tuvieron claro que iba a triunfar, y si no iba a ser por su carrera profesional, lo haría por su vida amorosa. Sus matrimonios con el actor Lex Barker y con el playboy Espartaco Santoni no le llevaron donde quería, pero sí lo consiguió con Hans Heinrich von Thyssen-Bornemisza, empresario y coleccionista de arte que hizo a Tita Baronesa Thyssen, experta en arte, feliz y que le convirtió en una mujer muy rica.
Viuda desde hace 14 años, Tita Cervera supo sobreponerse y es una de las mayores coleccionistas de arte de España. Ahora ha ofrecido una entrevista a Cinco Días en la que ha dado unos titulares que no han dejado indiferente a nadie.
" Ser rico siempre es difícil; es peor ser pobre. Conlleva una gran responsabilidad para uno mismo y las personas que dependen de ti", comentó Tita Cervera en la entrevista, en la que comentó también que ella es rica en una colección que no le genera beneficios: "Nunca he percibido nada de los dos museos. Me pago yo los billetes cuando vengo a las reuniones del patronato y demás reuniones".
También ha cargado contra el ministro en funciones de Hacienda, Cristóbal Montoro, de quien dice que le está persiguiendo. Además, ha criticado que en julio de 2015 Hacienda y la Guardia Civil abordaron su barco cuando navegaba en Ibiza. El motivo fue notificarle una inspección fiscal: "No entiendo esa persecución", ha comentado.
Por otro lado, ha justificado su decisión de ceder gratuitamente su colección al Estado durante seis meses, en vez de por un año como hasta ahora: " Lo que no se puede hacer es lo que se está haciendo con mi colección. Renuncié a la legítima de mi marido a favor de los herederos para que su colección estuviese como está hoy en día en el Museo Thyssen-Bornemisza. Los herederos no querían, ya que había una fortuna de por medio. Yo lo que tengo son cuadros y propiedades. No tengo liquidez ", asegura la Baronesa Thyssen, que asegura que le valdría con recibir una cantidad fija anual durante años a la que habría que sumar una primera opción de compra de las obras por parte del Estado.