Nacho Cano
La actriz conoció al teclista de Mecano en el videoclip 'La Fuerza del destino', una de las canciones más famosas del grupo en la que una joven Penélope Cruz de apenas catorce años hacía su primera aparición pública. La propia protagonista confesó años después que mintió al grupo cuando entonces afirmaba que ya tenía los 16 años que exigían para formar parte del videoclip, un detalle que pasó a un segundo plano, cuando ella y Nacho Cano se enamoraron.
Gigi Sarasola
El jinete fue la segunda pareja conocida públicamente de la intérprete madrileña. Hijo del empresario Enrique Sarasola, y hermano del dueño de importantes cadenas hoteleras, Kike Sarasola, Fernando Sarasola fue más conocido durante su época de jinete como Gigi. Participó en diversas citas olímpicas y ha logrado uno de los mejores resultados de un español en esta disciplina que se recuerden, una época que recuerda con especial cariño y que durante algún tiempo vivió de la mano de Penélope Cruz.
Con él la actriz dio el salto al mundo de la noche, comenzando así a rodearse de prestigiosos nombres de la alta sociedad y de ambientes alejados de la interpretación. Lo suyo no duró mucho, y lo cierto es que el propio Sarasola reconoce que será difícil librarse algún día de la etiqueta de 'novio de'. A pesar de ello, no duda en referirse a Penélope Cruz como "una persona maravillosa y digna de admirar por todo lo que ha conseguido".
Thomas Obermaier
Esta puede que sea la relación menos conocida de la actriz, fundamentalmente por la discreción o lo poco conocido que era él. Thomas Obermaier es un asistente de dirección y cámara al que Penélope Cruz conoció durante el rodaje de 'Abre los ojos', la cinta que se encargaría de encumbrar a la madrileña a finales de los noventa. Con él la relación tan solo duró dos años, pero suficientes para que él, preguntado años después se deshiciera en halagos hacia su ex, a la que definió como "divertida y ambiciosa".
Tom Cruise
En 2001 Penélope Cruz iniciaría el rodaje de la que fue una de sus grandes cartas de presentación en Estados Unidos, 'Vanilla Sky'. En ella compartía cartel con el mismísimo Tom Cruise, pero lo que muy pocos imaginaban por aquel entonces es que entre ellos saltaría la chispa del amor y comenzarían así una relación que duró más de lo que muchos apostaban. Y es que, incluso más de una década después de que ambos decidieran tomar caminos separados hay quienes todavía sostienen que lo suyo fue más una relación promocional o de conveniencia que amorosa.
Sea como fuere, los actores no dudaron en luchar contra los constantes rumores de separación y durante tres años fueron una de las parejas más perseguidas y que mayor pasiones levantaban en Hollywood. Constantes eran las visitas de uno a los rodajes del otro e incluso la española aceptó recibir unos cursos de la Cienciología, de la que Cruise se considera su más fiel seguidor. Sin embargo, parece que la negativa final de Cruz a entrar en ella, así como sus respectivos compromisos profesionales terminaron por debilitar una relación a la que en 2004 decidieron poner fin de una manera amistosa.
Matthew McConaughey
De nuevo una película volvía a poner a otra conquista en el camino de Penélope Cruz. En esta ocasión se trataba del film 'Sahara', donde compartió protagonismo con Matthew McCounaghey, uno de los actores con mayor fama de conquistador del panorama hollywoodiense. La relación comenzó en 2005, apenas un año después de que la madrileña rompiera con Tom Cruise y, por entonces, el actor estadounidense no tenía más que buenas palabras hacia la de Alcobendas.
"Hay un poco de dificultad por el idioma, pero es como poesía cuando sucede. Lo que más me gusta de ella es que todo lo ve como si fuera por primera vez. Es una de las mejores escuchadoras que he conocido", confesaba McCounaghey en su biografía. No obstante, estas virtudes no fueron suficientes para el intérprete quien, durante un viaje con Cruz en México, salió por la noche con un amigo y allí se cruzó con Camila Alves, la modelo por la que aquella misma noche dejó a Penélope Cruz y que se ha convertido en su mujer y madre de sus tres hijos.
Los romances no confirmados
Tras su ruptura con Matthew McCounaghey, fueron muchas las ocasiones en las que Penélope Cruz pasó a ocupar las portadas de diversas revistas y tabloides estadounidenses por sus rumoreadas relaciones con otros grandes nombres de la industria cinematográfica. De ellos, el primero en salir a la luz fue Orlando Bloom, con quien se la pudo ver cenando y después abandonando en el mismo coche un exclusivo local de Nueva York. Sin embargo, ninguno de sus protagonistas llegó a confirmar estas especulaciones.
Pero el mítico Will Turner de 'Piratas del Caribe' no sería el único, sino que años antes Matt Damon o Nicolas Cage ya habían sido relacionados con la intérprete española. De ellos no salió a la luz nunca ninguna prueba más allá de paseos, sonrisas o gestos cómplices de los que hacían gala en los estrenos de sus películas, ya que con ambos Penélope Cruz trabajó en 'La mandolina del Capitán Corelli' y 'All Pretty Horses'.
Javier Bardem
Ahora bien, fuera de estas relaciones o simples amoríos nunca confirmados, el otro gran nombre, y parece que ya el definitivo, en la lista de Penélope Cruz ha sido Javier Bardem. Ambos ya habían coincidido en 1992 rodando 'Jamón, Jamón', pero no fue hasta quince años después cuando la chispa surgiría entre ellos gracias a Woody Allen y su 'Vicky Cristina Barcelona'.
Ya en las premiere y los diferentes estrenos de la cinta a los que el elenco de la película acudía, era la pareja de españoles la que atraía toda la atención de unos periodistas deseosos de obtener una confirmación de su romance. No obstante, ellos no lo hicieron y solo se pudo conocer que entre ellos había algo más que amistad a través de instantáneas de la pareja disfrutando relajadamente de sus vacaciones.
En 2010 anunciaron por sorpresa su boda, celebrada en una finca de Las Bahamas propiedad de Jhonny Depp, gran amigo de ambos. Solo un año más tarde se convertirían en padres de su primer hijo, un pequeño al que llamaron Leo y que nació en Estados Unidos. Sin embargo, para el nacimiento de su segundo hijo, una niña llamado Luna, tanto Bardem como Cruz decidieron instalarse en España. Precisamente esta segunda maternidad fue la que provocó un auténtico vuelco en la vida de la madrileña, ya que tal y como ella misma explicó, se dio cuenta de que ella ya no era la prioridad, sino que lo era su familia.
Desde entonces, el matrimonio se ha mostrado muy relajado ante la prensa e incluso no han dudado en ensalzar al otro cuando se les pregunta. Ahora bien, ambos siguen con su máxima de no hablar de su relación, una promesa que acordaron cuando comenzó su idilio y que a día de hoy no dudan en mantener. Sin embargo, la intérprete hizo una excepción en su discurso tras recibir el Premio del Festival de San Sebastián en reconocimiento a toda su carrera: "A mis dos preciosos hijos y a mi marido Javier, el compañero de viaje más maravilloso que se puede tener; y sí, él también estaba incluido en mis sueños y está aquí conmigo".