Paz Padilla ha dejado su lado más sincero al descubierto en 'Mi casa es la tuya', el programa presentado por Bertín Osborne, con quien ha charlado sobre algunos aspectos no solo de su vida privada, tales como la muerte de us marido, sino también de su lado profesional después de su reciente e inesperada marcha de 'Got Talent', el concurso de talentos de Telecinco.
La presentadora se llevó un palo muy gordo cuando la productora del programa contactó con ella para comunicarle que no iba a seguir contando con ella en la siguiente edición, una noticia que le pilló por sorpresa y que no se esperaba para nada. "Yo dejé de trabajar para estar con Antonio y acompañarle. Me ha pasado factura. Me lo han dicho... Me han dicho que yo no estuve al 100% y le dije yo no estuve al 100% para ustedes pero sí con mi marido que era el que me necesitaba", ha contado un poco afectada.
"Yo era humorista, durante una año oculté que mi marido estaba malo. Lo dejaba dándose su tratamiento y me iba a trabajar, a ser graciosa. Nadie lo notó, me dijeron tú tranquila que vas a seguir trabajando, pero no. No me importa, si hoy tuviera que hacerlo lo volvería a hacer", ha dicho, sin arrepentirse por haber dejado su trabajo un poco de lado por todo lo que estaba atravesando en su vida personal.
Y es que pasar por algo tan delicado le ha hecho ver que ya no es posible que tenga miedo a nada. Ahora está viviendo una nueva etapa llena de agradecimiento y disfrutando de cada minuto junto a los suyos, que es lo más importante para ella. La televisiva se ha convertido en todo un ejemplo de visibilización de la muerte y el duelo, haciendo que deje de ser un tema tan tabú.
Disfrutando cada segundo de su vida
"La vida me dio el bofetón cuando Antonio enferma... Él me lo pidió en su testamento, me dijo 'no dejes de ser feliz y ama, sé feliz con las personas que aparezcan en tu vida ", ha contado, dando a entender que no va a dejar de cumplir con uno de los últimos deseos de su marido que además le hace mucho bien.