Ariadne Artiles no puede estar más feliz después de que sus gemelas hayan recibido el alta hospitalaria tras haber nacido prematuras. La modelo ha compartido sus sensaciones, diciendo: "Con María y Julieta ya en casa ha empezado una de las etapas más intensas y bonitas de nuestra vida".
Casi tres semanas después de su nacimiento ha sido cuando sus hijas han podido marcharse a casa, una noticia que compartió ella misma en sus redes sociales. También ha contado lo que ha supuesto para ella tener dos niñas a la vez: "El amor se multiplica. Cuánta razón tenían los que me decían que lo mejor estaba por llegar", ha dicho emocionada.
En estos momentos está centrada en el cuidado de sus hijas y también en su recuperación postparto, puesto que dar a luz no fue fácil ya que perdió mucha sangre tal y como ha contado. Ahora está cogiendo fuerzas tras la cesárea, aunque se encuentra mejor cada día. " Perdí mucha sangre, aproximadamente tres litros ", ha explicado, detallando que sus hijas vinieron al mundo en la semana 34 de gestación.
"Tenía placenta previa y pegada al útero. Era imposible poder parirlas y todo fue muy complicado. En algún momento os lo contaré bien... Al final todo sale bien si estamos en las manos adecuadas. No hay que asustarse ", ha dicho. Sobre sus hijas, ha añadido: "Están muy bien, fuertes y cada día más gorditas", y de paso ha querido contar el significado de los nombres que ella y su pareja han elegido para las pequeñas de la casa: "María por su padre, abuelo, bisabuela. Había muchas buenas razones. Julieta siempre fue mi nombre elegido si tenía una niña. A la tercera va la vencida".
Reposo y preocupación durante el embarazo
"Recibo muchos mensajes vuestros preguntándome si todo va bien, por qué no subo fotos embarazada, si es que estoy muy gorda o si no me siento bien... y la verdad es que no hay ninguna razón. No me avergüenza mi cuerpo, todo lo contrario, pero han sido unos meses difíciles", dijo en una ocasión sincerándose sobre cómo había sido su embarazo. Los médicos le recomendaron guardar reposo y por eso frenó un poco su ritmo de trabajo. " La preocupación constante de seguir adelante semana tras semana solo lo puede entender quien lo haya vivido", dijo sobre cómo se sentía, para añadir: "Es angustioso pensar y sentir que en cualquier momento pueden salir y no estén preparadas, sus pulmones no estén listos y yo no pueda hacer nada. La responsabilidad es muy grande y te vuelves mucho más hacia dentro intentando controlarlo todo. Después de estas semanas de vértigo ya estoy mucho más tranquila y siento que aguantaremos juntas hasta el final porque están en el mejor horno del mundo".