Después de haber ganado cuatro títulos del Grand Slam en categoría individual, seis en categoría de dobles y cuatro en dobles mixtos y coronarse como la número uno mundial del tenis en la categoría femenina, Arantxa Sánchez Vicario está siendo recordada más estos días por la presentación de su libro 'Arantxa ¡Vamos!' que por sus méritos deportivos.
Arantxa, volcada en su familia
No obstante, Arantxa no se arrepiente de nada, tal y como comentó en la celebración del 40 aniversario de Alberto Cerdán como estilista. "En el libro cuento lo que he vivido, mi verdad, lo que yo he hecho durante tantos años en mi vida pero no sólo el capítulo familiar en el que estáis todos volcados", dijo.
Josep Santacana, todo un padrazo
"Tengo dos hijos y una familia, estoy volcada en ellos. No me arrepiento. Os agradezco mucho todo el apoyo que he recibido y sigo recibiendo que me está mostrando ese cariño de cuando competía en las pistas", quiso explicar a los medios. "Son momentos difíciles y a seguir adelante y lo demás está en tema de abogados y la justicia dirá. He dicho lo que tenía que decir y ahora no depende de mí", añadió posteriormente.
Y es que a pesar de la polémica del libro, los rumores apuntan a que el motivo de las disputas familiares radican en su marido, José Santacana. Arantxa Sánchez Vicario y el empresario contrajeron matrimonio el 12 de septiembre de 2008 en el Castillo de Peralada en Girona. Fruto de esa relación nació su primera hija Arantxa el 27 de febrero de 2009 en Barcelona, y dos años más tarde vino al mundo su segundo hijo, un niño llamado Leo.
"Mi marido es un padrazo, mis hijos son maravillosos, muy buenos y yo estoy encantada con mi faceta como mamá", concluyó. No en vano, la tenista está muy enamorada a pesar de que la gente apunta que este matrimonio fue clave en la rupturas familiares entre los Vicario a raíz de un acuerdo prematrimonial.