Durante una entrevista a The Guardian no ha dudado en responder a las preguntas formuladas sobre la situación política de Cataluña y el Independentismo: "Entiendo el romanticismo de muchas personas, la voluntad política. La Constitución les permite tener un referéndum real, pero tienen un obstáculo frente a ellos llamado democracia". También se ha mostrado muy crítico con el movimiento secesionista y todo lo ocurrido durante el pasado 1 de Octubre de 2017: "Si decido llevar a mis hijos y abuelos como escudos violando la ley, las fuerzas van a tener que hacer frente a mis hijos y a mis abuelos. Es un poco curioso, ¿no? Hubo 900 personas heridas, ¿dónde están?", comentó al reportero.
El malagueño es consciente de la sensibilidad de este tema aún tan presente en España y la repercusión que puede tener cualquier tipo de opinión: "Esto es muy complicado, me voy a meter en un lió", y añade: "Creo que Picasso se habría mantenido del lado de la ley, de la Constitución".
Su estado de salud
Durante la mencionada entrevista también ha hablado de su delicado estado de salud y de uno de los momentos más complicados de su vida: el infarto que sufrió en enero de 2017: "Dejé de fumar. Hago mucho deporte y tomo los medicamentos recomendados. El peligro era algo que conocía, pero cuando lo ves frente a ti te das cuenta de que la existencia de la muerte es real". A pesar de todo, e intentando poner solución, esto no ha hecho que Banderas pierda las ganas de seguir viviendo como lo ha hecho siempre y eso implica llevar un ritmo frenético de trabajo: "A veces me quejo de que necesito descansar, pero después quiero comerme la vida", y sentencia: "No quiero vivir como si ya estuviera muerto. Voy a vivir y si me muero, me he muerto".