Estaba ella sola, sin su pareja, el actor Xabier Murua, padre de su futuro bebé, que no la pudo acompañar por motivos profesionales. Esto no le importó mucho a la protagonista de la serie 'La catedral del mar', a la que se le veía con muy buen aspecto a la salida de su visita médica.
De allí se fue a llenar el depósito de su coche para más tarde acercarse hasta una pastelería, pues tenía antojo de algo dulce y no reprimió esos deseos. Silvia, de 38 años, se encuentra muy bien y se puede permitir esos caprichos que surgen en ciertos momentos del embarazo.
Cumpliendo sueños
Así, si el año 2017 está siendo un año muy feliz para Silvia Abascal, en 2018 lo será aún mucho más, pues será cuando llegue al mundo su bebé, del que por el momento se desconoce el sexo que tendrá.
El retoño llenará de una mayor felicidad a la actriz y su pareja, que el año pasado trabajaron junto en la obra teatral 'La cocina', dirigida por Sergio Peris Mencheta.