A pesar de que la detención tuvo lugar el 12 de marzo de 2024, no fue hasta el pasado 2 de diciembre que se hacía público a través del diario ABC que el marido de Ángela Rozas, conocida en redes sociales como Madame de Rosa, tenía un historial delictivo de robos desde 1998 y que está cumpliendo condena prisión. El mismo medio había hablado con su abogada quien confirmaba ya que la influencer llevaba tiempo separada de él y confesaba el temor de que todo esto pueda afectar a su imagen pública y a sus contratos de trabajo.
24 horas después, este martes 3 de diciembre, era la propia Madame la que compartía un vídeo a través de sus stories de Instagram pronunciándose al respecto y sin poder evitar romper a llorar: " Me parte el alma tener que grabar este vídeo, pero no me queda más remedio. Los que me conocéis desde hace tiempo sabéis que siempre he mantenido mi vida laboral al margen de mi vida privada. Para mí es bastante fuerte tener que abrirla hacia vosotros de esta manera tan desagradable".
En este comunicado confirma llevar ya tiempo "sentimentalmente separada de mi marido", aunque no podía dejar de referirse a él como "mi marido" porque "tenemos un hijo, por costumbre y porque no quería hacerlo público". Ella nunca se había pronunciado al respecto de todo esto porque siempre ha querido mantener su vida personal y su vida profesional separadas, motivo por el que "entiendo perfectamente todo el revuelo que esto pueda suponer".
"Desde que lo conozco he intentado ayudarle"
Así Madame contaba un poco más de su historia de amor con el padre de su hijo que comenzó cuando tenía tan solo 14 años: " Le conozco desde que tengo 14 años, creo que eso os da bastante datos ", es decir, desde 1996, dos años antes de que la Policía fichase por primera vez al que luego sería su marido por varias operaciones de robos con fuerza en los que se registraron butrones, alunizajes o uso de coches de alta potencia par acceder a establecimientos de lujo, tal y como apuntaba ABC.
Sin confesar si era conocedora o no de las prácticas de su novio, luego marido y finalmente padre de su hijo, Ángela Rozas confiesa que por el amor que sentía por él siempre ha estado a su lado para intentar ayudale: " Yo solo os puedo decir que, si soy culpable de algo es de haberme enamorado (...) Desde que lo conozco he intentado ayudarle, a veces con más éxito, otras con menos éxito ".
Por ello y pese a todo el dolor que le ha supuesto esta relación, Madame también se muestra muy sincera sobre sus sentimientos hacia el padre de su hijo: " Desde la primera vez que le vi me enamoré de él y, a pesar de estar separada de él, creo que seguiré enamorada de él hasta que me muera. Mi vida os aseguro que no ha sido fácil", reconociendo que todo por lo que ha pasado solo lo saben "la gente cercana". Con todo esto solo tiene una petición: "Lo único que pido es respeto para mi hijo y para mí".