La espera ha terminado para Andy Murray y Kim Sears, que se han convertido en padres de una niña el pasado domingo por la noche. La noticia ha sido ofrecida por BBC, aunque no ha sido confirmada ni por el tenista, ni por su esposa, ni tampoco se han ofrecido más detalles sobre el peso o el estado de salud de la criatura.
La pareja quiso formalizar así su relación tras una década de amor, y una vez casados, se pusieron a buscar la llegada de un bebé que no tardaron en concebir y que ha llenado de felicidad el hogar de quien es número 2 del mundo en la ATP.
De vuelta a casa
Aunque estaba preocupado por si se perdía el nacimiento de su bebé por un torneo de tenis, lo cierto es que tras su derrota en la final del Open de Australia ante Novak Djokovic, confesó que lo primero que iba a hacer era coger un avión de vuelta para estar con su mujer antes de que diera a luz.