Por su parte, Ana Obregón trata de hacer oídos sordos, completamente convencida de la decisión que tomó en su momento y mostrándose extremadamente feliz con el giro de 180 grados que ha dado su vida. Por ello, comparte a veces contenido de la pequeña Ana Sandra en sus redes sociales, en las que acumula más de un millón de seguidores.
En esta ocasión, Ana Obregón ha decidido compartir unas emotivas fotografías con la niña en brazos, ambas tumbadas sobre una cama y posando frente a un espejo. A dichas instantáneas ha decidido llamarlas "El selfie de mi vida si mi hijo estuviera aquí", relatando en un largo texto unas palabras de agradecimiento para quienes la apoyan y grandes críticas para quienes no.
Ana Obregón, feliz y crítica en su último post
"Son pocas y sus palabras que lanzan como cuchillos me hacen cosquillas después de tener que enterrar a mi único hijo", continuó explicando ante su gran legión de seguidores la presentadora. "Sin embargo, la mayoría, me lanzáis palabras llenas de empatía y amor que me llegan directas al corazón. Gracias", quiso expresar para todos los que habían comprendido su intención de llevar a cabo la última voluntad de su hijo de traer un hijo al mundo.