En ese mismo lugar estaban algunas de sus grandes amigas, como Raquel Perera o Isabel Jiménez, así como Ana Obregón, también muy concienciada con la enfermedad desde que le tocó de lleno a su hijo Aless Lequio, quien murió de cáncer en 2020. La presentadora ha comentado que antes de su emotivo discurso pudo hablar con Sara Carbonero, revelando que fue una de las persona que la animó a pronunciar sus palabras.
"Me dijo: 'No sé si voy a poder'. Yo le dije: 'Mira, Sara, habla con el corazón", ha comentado Ana Obregón en 'Y ahora Sonsoles', programa en el que colabora. Y desveló: "La conocí en una circunstancia que no era agradable ni para ella ni para mí, porque coincidíamos en las quimios. Yo iba con mi hijo y Sara estaba con su madre", ha revelado, por lo que vivieron la enfermedad a la vez.
En cuanto a lo que piensa de Sara Carbonero, ha dicho: "Ella ha tenido el valor de hacerlo público. Es una valiente y nos ilumina a todos. Lleva seis años bien y va a seguir iluminándonos". Por otro lado, no solo habló de ella en el plató, sino que también se pronunció al respecto en su redes sociales, escribiendo en su cuenta de Instagram: "Querida Sara, sé lo difícil que fue para ti hablar a corazón abierto. Anoche lloré contigo. Tu catarsis, valentía y dulzura son un ejemplo para tantos pacientes del maldito cáncer. El alma fuerte y llena de luz no nace de un paraíso, sino de un infierno. Y tú nos iluminarás muchísimos años".
La toledana fue diagnosticada en 2019 de un cáncer de ovarios y de vez en cuando ha dado algunas pinceladas de su estado de ánimo a través de sus redes sociales, aunque nunca había hablado de su cáncer a corazón abierto como hasta ahora. En medio de todos estos años ha sido intervenida en más de una ocasión, teniendo que vivir con la incertidumbre, como ella misma ha señalado. Por otro lado, ha dejado claro que ya se ha hecho a la idea de que siempre será una paciente oncológica, por mucho que le pese.
Las palabras de aliento de Sara Carbonero
Por suerte ella puede contarlo, algo en lo que hizo hincapié, animando a otras mujeres que además son madres como ella a que sigan adelante, porque hay salida y porque algún día mirarán con retrospectiva y se sentirán orgullosas de su camino recorrido, pudiendo disfrutar de sus hijos como ella ahora hace.