Ana Boyer se perfila como una digna sucesora de su madre, Isabel Preysler, a pesar de que parecía que ese camino lo había tomado Tamara Falcó, mientras que su quinta hija parecía encaminarse más a una existencia discreta y más alejada de los focos, heredando así el carácter de su padre, Miguel Boyer.
Junto a la anfitriona estuvo la actriz Amaia Salamanca, que posó junto a Ana Boyer con un vestido beige de encaje con el que estaba espectacular; no falló el torero José María Manzanares, que llevaba una venda en la mano izquierda, resquicio de una lesión.
Los Duques de Alba regresan a Sevilla tras su paso por Madrid
Otros de los asistentes fueron tres parejas de amigos, los diseñadores Victorio&Lucchino, Curro Romero y Carmen Tello y los Duques de Alba. Aunque Doña Cayetana ya no asiste a tantos eventos como antaño, lo cierto es que no ha renunciado a la vida social.
A sus 86 años, a la Duquesa no le importa viajar, pues si el martes estuvo en Madrid con motivo de la visita de la Reina Sofía a la muestra 'El Legado Casa de Alba' que se expone en el Palacio de Cibeles, ahora se encuentra en Sevilla, donde reside habitualmente en el Palacio de las Dueñas junto a Alfonso Díez.