La enemistad entre el clan Kardashian Jenner y Amber Rose ha vuelto ha salir a la luz por culpa de una inoportuna casualidad. La hermanastra de las Kardashian, Kendall Jenner, y la modelo acudieron al festival Coachella por separado sin poder evitar verse las caras.
Todo sucedió en la fiesta de la piscina de McDonalds y Chevrolet en la urbanización de Bootsy Belows a la que Rose y Kendall acudieron. En un momento de la fiesta, Rose se apoyó en una cabaña que desafortunadamente estaba reservada a nombre de Kendall Jenner.
Una testigo del momento en el que llegó Jenner asegura que nada más ver a Rose sentada en su mesa exclamó: " En serio, no puede estar pasando esto ". Acto seguido uno de sus hombres de seguridad, invitó amablemente a Rose a abandonar la mesa. Pero ella, repuso que su copa esta allí.
Las enemigas de mis amigas son mis enemigas
Tras las insistencias del de seguridad, la modelo abandonó la mesa, no sin antes dirigir una mirada matadora a Jenner. La enemistad entre ambas proviene del romance entre Kylie Jenner y el rapero, Tyga que dejó a la mejor amiga de Rose, Chyna por estar con la joven de 17 años.