Lequio ha dicho de la ausencia de su hijo: "Álex no ha podido venir. Tenía la intención de hacerlo. Quería venir unos días, no solo a esto. Quería venir para ver a la familia, para estar en casa, para alejarse del día a día del hospital, pero ayer se lo desaconsejaron por completo". Por otro lado, ha continuado diciendo: "Me cuesta mantener una sonrisa pero es lo que hay que hacer. Es una enfermedad que asusta, pero hay que trabajar todos los días y con todos los medios a tu alcance".
En cuanto a una posible intervención, ha dejado claro que ahora están pendientes de otra cosa: "Estamos en lo que estamos, lo otro es especular". Por lo pronto, dejó claro que la madre de su hijo, Ana Obregón, está al pie del cañón a su lado en un momento tan complicado para la familia: "Ana es extraordinaria y aprovecho para decir que la única mujer que acompaña a mi hijo desde hace dos meses es su madre, no hay nadie más". Todo parece indicar que la novia de su hijo, Francisca, habría regresado a España.
En cuanto al motivo por el que su hijo se está tratando en Estados Unidos, ha contado lo siguiente: "Por su edad hemos preferido que esté en las mejores manos, y las mejores manos son las de un español, Josep Baselga, y es algo que debería llenaros a todos de orgullo". Por otro lado, ha aprovechado para desmentir que su hijo tuviera una gran fiesta de cumpleaños el pasado 23 de junio: "No pude estar pero no se le organizó ninguna fiesta. Es una enfermedad dura y larga y sabéis de lo que estamos hablando".
Más de dos meses desde su marcha a Estados Unidos
Fue el pasado mes de abril cuando la familia al completo fue vista en Nueva York entrando en un centro médico. A lo largo de estos meses han preferido guardar silencio, y han procurado llevar el tema con máxima discreción.