Declarado en rebeldía
En 2020, Alejandro Sanz tenía una deuda de unos 12 millones de dólares. Después de vender algunos inmuebles, el cantante ha conseguido que la cifra de dinero que debe se reduzca notablemente, quedándose finalmente en tres millones de euros. Una cifra que tendrá que pagar con sus propiedades para hacer frente al pago.
El Juzgado de Primera Instancia número 47 de Madrid ha sido el encargado de declarar al cantante en rebeldía. Así, la magistrada ha ordenado la ejecución de la condena propuesta por la Corte de Miami. En esta sentencia, se establece que Alejandro Sanz tendrá que hacer frente con su patrimonio personal por no haber pagado los préstamos que pidió en Florida.
La sentencia, podría acabar confiscándole a Alejandro Sanz la casa que tiene en Miami y que es de 1933. Una vivienda que cuenta con más de 3.000 metros cuadrados, cinco baños, seis habitaciones, un estudio de grabación, una piscina y hasta un muelle privado situado en Sunset Lake. Tras la condena, el cantante deberá afrontar los impagos y responder a sus problemas con Hacienda como el Juzgado haya determinado.