El Rocío es una celebración muy especial para muchas personas, entre las que se encuentran rostros tan conocidos como la presentadora Eva González, la empresaria Raquel Bollo, la cantante Pastora Soler, Vicky Martín Berrocal o su hija, Alba Díaz, que no ha dudado en compartir cómo ha ido su romería a pie hacia la ermita de El Rocío, una pequeña aldea de Almonte (Huelva).
A través de sus redes sociales, la joven ha compartido cómo han sido tanto los días previos al evento como su experiencia allí. Durante todo momento se ha mostrado muy feliz de estar allí compartiendo ese momento tan especial con su madre y su abuela. Ella definía el día como uno de los "más emotivos e increíbles" de su vida. Además, agradecía a su familia por haberle inculcado esta festividad desde el día en que nació.
Vicky Martín Berrocal y su hija Alba Díaz en el concierto de Rosalía en MadridSin embargo, y haciendo uso de la naturalidad que le caracteriza, la hija de 'El Cordobés' ha decidido contar a todos sus seguidores el pequeño percance de salud que se le ha supuesto un gran susto. Todo esto ocurre cuando Alba Díaz se iba a tomar algo con unos amigos para hacer un descanso en el camino, pero al final, el momento de relax ha acabado siendo todo lo contrario a lo que ella esperaba.
Un gran susto
La joven ha admitido que estaba reventada por haber estado todo el día sin parar, incluso ha dicho que podría estar cansada emocionalmente. Es una teoría que cuadra perfectamente ya que El Rocío significa un día de muchos sentimientos para ella y más por haber estado tanto al lado de su madre y su abuela, quienes habían hecho de ese día algo único.
Alba Díaz con su abuela en El Rocío / Foto: InstagramSin embargo, después de este momento tan bonito venía el peor momento de Alba Díaz. "Ayer tuve un momento vómito en el camino. Estaba bebiendo mucho agua, estaba como deshidratada", empezaba diciendo la andaluza. A raíz de esto contaba cómo se bebió hasta diez litros de agua, tanto que se acabó, pero eso no fue suficiente para que ella se encontrara bien. "De repente mi cuerpo me dice que me agarre el carruaje para respirar. Tosía negro. Me engancho, se me va la mano porque no tenía fuerzas, me caigo de boca en la arena ", explicaba. Después aseguraba que la gente le tuvo que coger la frente y ayudarle, algo que, sin duda, será un recuerdo que le marqué para la próxima romería de El Rocío.
