La colaboradora de televisión ha contado un poco sobre cómo es hijo, haciendo alusión a u padre y los comienzos de su relación.
Alba Carrillo está disfrutando de un verano pleno e inolvidable tal y como ella misma ha estado contando a través de sus redes sociales. Tras pasar unos días por Ibiza con algunas amistades, sumándose a los numerosos famosos que eligen dicha isla como destino de sus vacaciones de verano, ha querido disfrutar de la tranquilidad de su pueblo.
Nava del Barco, una localidad de Ávila que no llega a los cien habitantes, es su refugio, y además está muy orgullosa de tenerlo. Ha sido en esta escapada en la que ha disfrutado de las fiestas de la localidad cuando se ha puesto a reflexionar, hablando incluso de una relación del pasado con nostalgia."Señor Shakespeare, la noche de ayer sí fue 'Sueño de una noche de verano'. Hasta el señor Carrillo se vino arriba en la verbena de la plaza del pueblo... Lucas consiguió dos premios: El de fútbol y el de dibujo. Ya me avisó: 'Mamá, voy a ganar el premio de dibujo, voy a por todas'", empieza diciendo el texto que ha compartido en sus redes sociales.
La parte nostálgica ha llegado después, diciendo: "Y es como sus padres, los dos, si se le mete algo en la cabeza es mejor quitarle la cabeza que la idea. Prueba viviente de esa tozudez es él mismo, no sé cuántas veces me llamó su padre para tener una cita... Somos así. Yo bailé todas las canciones del verano y hoy me levanto con dos calenturas...cicatrices de guerra...noches alegres!!! Sigo pensando que Mi pueblo es la leche!! y que no pienso faltar ni un año...es mi peregrinación personal a la Meca de mis raíces", terminaba, hablando de cómo Fonsi Nieto, el padre de su hijo Lucas, la conquistó, y de otros muchos asuntos relacionados con su pueblo. Ahora se llevan bien
Con el tiempo, aunque no ha sido nada fácil, ambos han conseguido tener una relación bastante cordial por el bien del niño. Tras su ruptura en 2012 han pasado por varias etapas, y es que en un primer momento, comenzaron con una guerra pública que no iba por buen pie, pero después recapacitaron y las cosas entre ellos cambiaron, aunque fue toda una sorpresa.