La colaboradora de televisión se ha mostrado muy indignada y decepcionada, porque no se esperaba que se portara así con ella.
Ha sido toda una sorpresa saber que Santi Burgoa, presentador que mantuvo una relación sentimental con Alba Carrillo, está saliendo con Vanesa Romero. Los dos se conocieron en un programa de Telemadrid, y parece ser que entre el plató y los pasillos saltó la chispa entre ambos, porque han sido vistos paseando por Madrid en más de una ocasión siendo muy cómplices y cercanos.
Lo que muchos esperaban era ver la reacción de la exnovia del presentador, con la que estuvo saliendo dos años hasta que a finales de 2021 confirmaron su ruptura, no obstante, dejaron la puerta abierta a una reconciliación. Ha sido en 'ya es mediodía' donde Joaquín Prat no ha podido evitar preguntar a Alba Carrillo qué piensa al respecto, y sin duda alguna su reacción ha sorprendido bastante, y más teniendo en cuenta que al parecer su vínculo con él aún seguía siendo fuerte. "Por él estoy contenta, por ella ya no tanto... pero por él me alegro mucho", ha sido una de las primeras cosas que ha dicho, soltando una risilla. Por otro lado, ha confesado que está un poco enfadada, porque no tenía ni idea de esta relación. "Éramos amigos y no me ha contado nada, sabiendo dónde trabajo... Desde ayer no me coge el teléfono y no se hacen así las cosas", ha dicho, para añadir: "Sobre todo porque no puedes estar calentándome la oreja a mí, a mi padre y a toda mi familia hasta hace cuatro días, y estar con ella...".
De esta manera ha dejado en el aire que quizás podrían haber dado una nueva oportunidad a su relación, aunque en vista de estas imágenes está claro que no. "Se ha portado mal, porque yo soy la que le dejé y he estado frenando cosas. No me ha dejado tener pareja todo este año porque se moría de celos, y ahora de repente pasa esto... Ni me avisa, ni me coge el teléfono, ni nada... o sea, todo muy loco. Entonces digo, 'este chico no está bien'", ha confesado. Alucinando con esta relación
Parece ser que aunque de cara a la galería no estuvieran juntos, aún seguían muy unidos y no habían rehecho su vida, al menos no Alba Carrillo, que se ha quedado de piedra al descubrir que Santi Burgoa ha jugado sus cartas de una manera muy distinta, siempre a sus espaldas pese a ser buenos amigos.