Según la versión de Nizar, Mariano Navarro la increpó y terminó dándole una bofetada. Llegados a este punto, la colaboradora demandó tal episodio y una vez el juicio entre las dos partes se celebró, la sentencia condenó al hombre por "un delito de lesiones previsto y penado en el articulo 147.3 del Código Penal" e indemnizar durante un mes con una cuota diaria de diez euros a la vallisoletana junto a los costes del juicio, sin incluir las de acusación que no estarían solicitadas.
No hubo suerte para Mariano
Tal conflicto no quedó así, ya que el abogado de Irma Soriano decidió recurrir al veredicto del juez porque Mariano Navarro consideraba que se había producido un "error de hecho en la valoración y apreciación de la prueba que ha conllevado a la infracción del principio constitucionalmente reconocido de la presunción de inocencia". Según el esposo de Soriano, Aída Nízar había llevado como testigo a alguien a quien sí conocía cuando había alegado que no.
Finalmente, el juzgado ha desestimado dicho recurso por lo que la sentencia ha pasado a ser oficial. De esta forma, frente a la justicia, Aída Nízar recibió una bofetada del marido de Irma Soriano, Mariano Navarro y ahora tiene que hacerse cargo de pagar cada una de las consecuencias.