Allí, la diseñadora madrileña ha reconocido que su pareja, el empresario Luis Miguel Rodríguez, está siendo imprescindible para ella en estos momentos: "Me está cuidando una barbaridad. Me da pena lo mucho que me está cuidando. Lo valoro una burrada", contaba.
Además, lanzó un dardo a su expareja Pedro J. Ramírez, cuando una periodista le preguntó si "el anterior" le cuidaba tanto. "¡No, muchísimo menos! Una diferencia abismal", respondía sin dudarlo la diseñadora, que contó incluso que se rompió el pie y el periodista ni tan siquiera le acompañó al hospital.
No irá a la boda de la colaboradora
La diseñadora y la colaboradora son dos grandes amigas pero no se las verá juntas el próximo 22 de junio, día en que Belén Esteban y Miguel Marcos pasarán por el altar para darse el sí quiero. "No me ha invitado al final, qué pena", reconocía Ágatha Ruiz de la Prada, que entiende que al ser una boda íntima se haya quedado sin invitación: "Tenían que haber sido como 200 invitados más para que yo hubiera entrado". Pese a esto, le desea lo mejor: "Que lo pase fenomenal, que la quiero mucho y que está guapísima" y envidia que la colaboradora tenga tanta ilusión por tal ceremonia, ya que ella no tiene ni el más mínimo interés de pasar otra vez por el altar: "Déjate de bodas, que yo nunca me quería casar y fíjate", ha confesado la diseñadora en referencia a su última y malparada relación.