Después de conocer de cerca la justicia tailandesa, ha querido avisar a los padres del preso de lo que puede pasar.
Frank Cuesta conoce muy bien el funcionamiento de la justicia tailandesa, ya que luchó para que Yuyee, la madre de sus hijos, pudiera ser puesta en libertad allá por el año 2014. Aunque ya no estaban juntos, luchó por ella contra viento y marea. Fue condenada por un delito de tráfico de drogas -5 miligramos de cocaína- e ingresó en una cárcel de Tailandia para cumplir 15 años de pena, pero en noviembre de 2020 fue puesta en libertad después de seis años y medio en la cárcel.
Ahora ha comentado lo que piensa de Daniel Sancho, quien en dicho país ha sido condenado a cadena perpetua por el asesinato premeditado de Edwin Arrieta. Tras conocerse la sentencia, fue trasladado desde la prisión de Koh Samui hasta la prisión Central de Surat Thani, un lugar mucho más peligroso para cumplir esta condena. El aventurero ha querido enviar un mensaje a los padres de Daniel Sancho, Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo, para que sean conscientes de la realidad que va a vivir su hijo de ahora en adelante. "Lo que tienen que pensar los padres es que si quieren que su hijo vuelva a casa en 8 o 10 años, su hijo tiene que estar bien de la cabeza", ha comenzado diciendo.
"Su hijo, ahora mismo, no está bien de la cabeza y no es porque haya asesinado a alguien, sino porque lo primero que hace un preso con una cultura extranjera en Tailandia cuando le condenan a una pena larga, es pensar en quitarse la vida, en escaparse o en cómo poder pagar para poder salir", ha asegurado en el canal de YouTube de The Grefg.Todavía no está todo decidido
Entre tanto, ha opinado sobre el equipo legal de Daniel Sancho, considerando que no está gestionando bien su estrategia después de la condena, diciendo que están perdiendo el tiempo en recursos. De momento, la pena de Daniel Sancho puede ser apelada ante dos tribunales en Tailandia, incluido el Supremo, y su equipo legal trabaja en la posibilidad de acelerar su regreso a España, mientras que su familia quiere ir hasta el final.